Vida y mente son sistemas en constante cambio. Negarte la posibilidad de cambiar para quedarte en el ‘Yo soy así’ es revolcarse en la mediocridad, escudándote detrás de esa coraza que solo esconde un enorme miedo a avanzar.
En estos días he estado en un pequeño receso y en este receso no hice más que sorprenderme con cada posibilidad de aprendizaje que la vida me da.
Desde ver el nacimiento de unas tortuguillas hasta las consecuencias que puede traer no decir no y no colocar sanos límites.
Eso solo es posible cuando te conviertes en aprendiz de la vida y miras cada experiencia como un observador maravillado por la posibilidad de cambio.
Para serlo y hacerlo de este modo, es necesario dejarte sorprender por cada experiencia que tengas, sin juzgarla como buena o mala, sea como sea, a pesar de como te puedes estar sintiendo, representa un aprendizaje.
TODO ABSOLUTAMENTE TODO LO QUE OCURRE ES PARA BIEN
Ahora bien sin cambios no hay aprendizaje y en su mayoría estos cambios vienen impulsados por pequeñas o grandes crisis existenciales, esas que responden a la pregunta ¿Que estoy haciendo con mi vida?
Aquí te voy a dejar 3 estrategias para impulsar los cambios que necesitas en tu vida y salir de la crisis en la que quizá te encuentras.
1. Revisa tus conductas:
Esas que te siguen generando los mismos resultados una y otra vez, esos patrones que están en el plano inconsciente pero que se muestran a través de tus acciones, gestos o opiniones.
2. Asume un compromiso contigo:
Decide cambiarlas y compromete contigo, para ello debe existir un motor bastante fuerte, por lo menos debes tener 4 razones poderosas por las que necesites cambiar lo que vienes haciendo hasta el momento. Reflexiona, toma papel y lápiz y anota. Hazlas visibles para que cada día puedas llenarte de esa fuerza que impulsará tu cambio.
3.Acciona:
Sin acción no hay paraíso, la gran diferencia la hacen tus acciones, aquí tienes que nota en un papel que dividirás en 2 columnas, a tu izquierda colocarás las conductas que tienes en este momento y quieres cambiar y a tu derecha, colocarás las acciones que la sustituirán.
Lo que quiere decir que los cambios no se dejan al azar, los cambios se planifican y se practican hasta lograr que lo nuevo sustituya los viejo.
Yo no te diré que serán 10 o 21 días, te diré que será el tiempo que tu desde tu individualidad necesitas y de tu proceso natural de resistencia al cambio.
Es posible cambiar, jamás creeré que las personas no cambian, decir esto, sería negar mi propia transformación.
Creo que puedes convertirte en la persona que quieras ser, eso sí, necesitas de mucha voluntad y acciones deliberadas y conscientes que apoyen tu cambio.
Si te caes, que importa, te sacudes y te vuelves a levantar, tomando que te dará tu propia caída.
Recuerda «El oro aunque se caiga en el lodo nunca deja de ser oro». Así que a volverlo a intentar, a cambiar y a brillar.
Con amor,
Coach Bárbara Ortega
@coachbarbaraortega
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