Una de las mansiones del lujoso sector Garden District de Nueva Orleans, Luisiana, que pertenece a los artistas, ardió en llamas en la noche del pasado miércoles.
La pareja se enteró cuando una llamada informó de la supuesta presencia de una persona sospechosa en las adyacencias de la propiedad, por lo que las autoridades se trasladaron hasta la mansión y con la ayuda de 22 bomberos, quienes trabajaron durante dos horas, se pudieron extinguir las llamas en la vivienda.
Esta enorme morada está valorada, nada más y nada menos que, en dos millones de dólares, según el New York Post. Resulta que por ser una casa estilo colonial, su precio aumenta al poseer años de historia en sus paredes.
«Si no hubieran llegado allí cuando lo hicieron, podría haber sido mucho peor. Es una casa histórica», dijo un portavoz de los bomberos al periódico. También trascendió que no hubo heridos ni tuvieron que evacuar a los vecinos.
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