La Asociación Civil Asosiderúrgico precisó que han dado un paso significativo en su proceso de reestructuración al convocar a sus 3.573 afiliados, accionistas clase B, a unirse a la Asociación Civil Sin Fines de Lucro.
Este hecho marca el cierre de la etapa de manifestación de voluntad y el inicio de la entrega formal de documentación clave.
Hermes Rodriguez, representante de la asociación, destacó para Nueva Prensa Digital que la importancia de esta jornada es que están avanzando hacia la siguiente fase con la entrega de cuatro bases digitalizadas fundamentales.
«Estas bases abarcan desde accionistas dispuestos a vender acciones hasta reclamos por diferencias, solicitudes de documentos extraviados y reclamos de aquellos que buscan ser reconocidos como accionistas legítimos», aseguró.
Asimismo, detalló la diversidad de los participantes, que incluye accionistas activos, jubilados, pensionados, herederos y causahabientes, lo que refleja un universo de 6.226 individuos.
«Muchos de nuestros miembros han dedicado décadas de servicio a la empresa, algunos hasta 45 años, y es crucial que sus derechos sean reconocidos y compensados adecuadamente», subrayó Rodriguez.
Transparencia por accionistas clase B
En aras de la transparencia y legalidad, la asociación también ha entregado actas constitutivas, estatutos, copias certificadas y firmas de respaldo, garantizando su solicitud de un trato justo y equitativo en la discusión del valor de la acción.
«Basándonos en principios constitucionales y legales, apelamos a la igualdad de condiciones en el pago de nuestras acciones, tal como se hizo con el Consorcio Amazónico», explicó Rodriguez.
Valor de las acciones
El representante puntualizó que el siguiente paso crucial implica la discusión del valor de las acciones y la culminación exitosa del proceso organizacional.
«La colaboración con la Junta Interventora y el apoyo de las autoridades son vitales para alcanzar una resolución satisfactoria», sentenció.
Igualmente, afianzó que la llegada de la vicepresidenta de la República a la región, les ofrece una oportunidad para abordar estas preocupaciones de manera definitiva.
«A medida que se avanza, se debe considerar la urgencia de esta situación, con más de 654 accionistas clase B fallecidos, cuyos derechos también deben ser protegidos y respetados», recalcó.
La Asociación Civil Asociarúrgica espera ansiosamente una pronta resolución que refleje la justicia y equidad que sus miembros merecen.
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