La compañía especializada en robótica, Boston Dynamics, nuevamente cautivó a la comunidad tecnológica con la innovadora habilidad de su súper robot ‘Atlas’, realizando trabajos mientras bailaba.
‘Atlas’ es reconocido por sus capacidades de saltar, correr y ejecutar movimientos semejantes a los de una persona. En su más reciente rediseño se le incorporaron dos pinzas que actúan como manos, brindando al robot la opción de agarrar y soltar artículos de forma independiente.
No obstante, el aspecto que impresionó al público fue su habilidad de sumar el baile a sus actividades cotidianas, mostrando su gran adaptabilidad y agilidad tecnológica.
Atlas Gets a Grip | Boston Dynamics
Capacidades de ‘Atlas’
Tras su presentación en 2013, el robot ha resaltado por realizar acciones y destrezas comparables con las del ser humano, las cuales fueron ilustradas a través de videos que se hicieron virales.
Los creadores de ‘Atlas’ afirmaron que el enfoque principal del desarrollo del robot no es la comercialización, sino que se logre impulsar el avance del estudio centrado en el área de la robótica, con el propósito de fabricar un artefacto capaz de realizar cualquier trabajo que se le designe.
Con la idea de obtener los resultados esperados, han configurado al robot para efectuar acciones que precisan de la búsqueda de múltiples soluciones, como el parkour, esto para comprender sus limitaciones físicas, y el baile, para optimizar la precisión de sus movimientos.
Las nuevas “manos” robóticas
Unas de sus más recientes adquisiciones fueron un par de pinzas, cuyo diseño consiste en un dedo fijo y otro móvil, siendo más efectivo para la manipulación de cargas pesadas.
Durante su última prueba, se estudiaron las habilidades actuales de ‘Atlas’ en un entorno que simulaba ser una construcción, donde se le dió la tarea de entregar un bolso de herramientas a una persona ubicada en lo alto de la estructura.
‘Atlas’ primero realizó un análisis a su alrededor, agarró una tabla para crear un puente y pasar un obstáculo.
Luego de superar la primera prueba, levantó la mochila, subió unas escaleras, caminó sobre el puente que instaló y, después de saltar a otra base, le arrojó el kit al experto.
Finalmente, bajó de la construcción y ejecutó un giro aéreo, basado en un movimiento de parkour.
Los ingenieros a cargo de la iniciativa han señalado que los nuevos avances, las innovadoras incorporaciones en el diseño y la rapidez de ‘Atlas’ para efectuar dichas acciones, son una muestra del gran avance tecnológico para la robótica.
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