Sao Paulo.- El Gobierno brasileño decretó este lunes un aumento del 7,42 % del salario mínimo para 2023, con lo que a partir de enero llegará a los 1.302 reales (unos 244 dólares).
La medida deberá ser confirmada por una ley y puede ser revisada por el futuro Gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva, quien asumirá la Presidencia el próximo 1 de enero y estudia ofrecer un aumento mayor.
Esta es la primera vez que el Gobierno de Jair Bolsonaro eleva el salario mínimo por encima de la inflación, que en noviembre acumula un alza del 5,9 % interanual.
La Secretaría General de la Presidencia informó que tomó en cuenta un cálculo de una inflación del 5,81 % al cierre del año.
El valor del salario mínimo ya estaba contemplado en el proyecto de ley de presupuestos generales, que actualmente está siendo discutida en el Congreso Nacional.
El equipo de transición encabezado por Lula ha adelantado que estudia proponer que el salario mínimo se eleve hasta los 1.320 reales (cerca de 247 dólares), aunque este proyecto aún está en estudio.
Cerca del 35 % de los trabajadores asalariados en Brasil cobran el salario mínimo, lo que supone unos 34 millones de personas, según datos oficiales.
No obstante, cerca del 40 % de los trabajadores están en la informalidad y buena parte de ellos cobran menos de un salario mínimo por mes.
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