Buhoneros del centro de San Félix, ubicados en las calles Mariño, Sucre y Ramírez, se han mantenido por tres días resguardando sus puestos de trabajo, en rechazo a la instalación de nuevas estructuras por parte de la Alcaldía de Caroní.
Martha Tizoi, autoridad indígena y representante de la calle Sucre, alegó para el equipo de Nueva Prensa Digital que ellos están de acuerdo con el embellecimiento del centro de San Félix, pero rechazan pagar 950 dólares por los nuevos puestos.
Tizoi resaltó que ellos quieren mantener sus propios espacios, «con otra estructura que no sea la que trajo la alcaldía y tampoco las que ya tenemos aquí», aclaró.
Comerciantes señalan que las casillas ofrecidas por los funcionarios de la Alcaldía de Caroní no son de buena calidad y alegan que con las lluvias pueden sufrir filtraciones.
Tizoi aseguró que ellos aceptan pagarle los impuestos a la municipalidad, que están programados según la ordenanza municipal, y que en tiempos anteriores lo venían haciendo.
Afectados
En los corredores de la calle Mariño son 66 comerciantes afectados, 150 en la calle Sucre, y 100 en la Calle Ramírez; todos están en desacuerdo con ser trasladados a un nuevo bulevar.
«Ellos dicen para crear otro bulevar, es decir, caos y más caos. Trancada de calle y más trancada de calle, de la cual no estamos de acuerdo», expresó Tizoi.
Diario vivir
Trabajadores informales llevan días de vigilia en estos espacios de San Félix, resguarando el lugar que les ha servido en su diario vivir desde hace muchos años. Así lo explicó Mayori Varga, otra representante de la economía informal.
Explica que de su trabajo viven sus hijos, les pagan sus estudios y compran los alimentos para sus hogares.
«La verdad tenemos muchas responsabilidades, y no todo lo que brilla es oro. A veces en los puestos tenemos deudas, son mercancías que Gracias a Dios por nuestro buen comportamiento hemos tenido créditos, y nosotros tenemos esta responsabilidad de pagar a tiempo», declaró.
Al respecto, este grupo de comerciantes informales han perdido varios días de trabajos, los cuales manifiestan que no serán recuperados y les está causando muchos problemas.
Mesa de diálogo
Entre las exigencias de los comerciantes, está el poder tener una mesa de diálogo donde se encuentre presente el alcalde del municipio Caroní, Tito Oviedo, y así poder entregarle una propuesta.
«Nosotros aceptamos las medidas impuestas por la alcaldía 1.80 x 1.80 pero con 2.70 metros de largo, un mismo color y un mismo diseño. Sin embargo, que sea un trabajo hecho por nuestra cuenta, sin tener que deberle a nadie», exhortaron los buhoneros.
«Si quieren embellecer a una ciudad, es buscando el bienestar para todos, no es el beneficio nada más de uno de ellos».
Destitución de Denny Mazo
El día miércoles, 17 de agosto, los comerciantes informales recolectaron 750 firmas para pedir la destitución de Denny Mazo, quien es el director de la Economía Eventual.
«Tampoco aceptamos la directiva de aquí, la de Nisbel Nuñez y de Gustavo Pacheco, tenemos todas las actas», indicó Varga.
Aseguran que estos funcionarios no están al frente de los buhoneros y que están pasando por encima del poder popular.
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