Vuelve a mí tu rostro y tenme compasión, pues me encuentro solo y afligido.
Salmo 25:16 NVI
https://bible.com/bible/128/psa.25.16.NVI
En muchos momentos de tu vida, puedes sentirte solo, la soledad es ese sentimiento interno que cuando te golpea, sientes como si todos en el mundo te hubieran dado la espalda. Lo peor de todo, es que puedes sentir que hasta Dios mismo se alejó de ti.
Cuando David le expresa a Dios vuelve a mí tu rostro, él se sentía solo y afligido, le dolía el corazón, ocasionado por su angustia en medio de una persecución. Los días del rey no atravesaban los mejores momentos, y el salmista se dirige a Dios para encontrar refugio.
David no se estaba quejando, simplemente le estaba pidiendo a Dios que se volviera a él. Solo quería sentir que Dios lo estaba viendo, él sabía que mientras Dios lo viera, aun en la situación que se encontraba, para David sería suficiente.
En los momentos difíciles es cuando debemos aún más aferrarnos a las promesas del Señor, Él es fiel y cumple su Palabra, esforcémonos por dejar de hundirnos en la tristeza y la miseria sin buscar soluciones.
El salmo 25 es una muestra que, pase lo que pase, debemos buscar a Dios. Sobre todo cuando nos encontramos en los momentos de debilidad, debemos clamar al Padre celestial por ayuda. ¡Dios es bueno y digno de alabar, búscalo siempre, en especial cuando te sientas solo, Él se dejará encontrar!
Pr. José N. Corrales
[email protected]
@pastorcorrales
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