Miami.- Los restos de José José aún no descansan en paz en Miami tras una nueva disputa entre sus familiares, ahora a causa de la incineración del mexicano que, según dijeron a Efe este lunes fuentes del consulado de ese país, se efectuará tal como ya lo informó la hija menor.
Luego de que el domingo Sarita Sosa, hija menor del llamado Príncipe de la canción, diera a conocer que los restos de José José serían incinerados y que una mitad de las cenizas se quedaría en Miami y la otra iría a México, este lunes el primogénito, José Joel, dio a conocer que habían paralizado el proceso por dos días.
Como ya lo había dejado entrever en entrevistas a medios de Miami, José Joel utilizó sus redes sociales para informar que junto a su hermana, Marysol, fruto de la unión del cantante con su segunda esposa, Ana Elena «Anel» Noreña, lograron posponer el proceso de cremación por 48 horas, «gracias a un equipo de abogados y amigos» aunque sin detallar si es que hubo de por medio algún recurso legal.
Tras este anuncio, fuentes del consulado mexicano en esta ciudad han señalado a Efe que ese desencuentro «ha sido superado» y que finalmente una mitad de las cenizas de José Rómulo Sosa Ortiz, nombre de pila del intérprete, viajará la mañana del miércoles en un avión de las Fuerzas Aéreas de ese país rumbo a Ciudad de México y en compañía de familiares. Agregaron que desde la oficina consular se está asistiendo a la familia con los preparativos para dicho traslado.
Los hijos mayores han peleado hasta el final la posibilidad de que al intérprete de «Gavilán o Paloma» se le puedan hacer de cuerpo presente los homenajes previstos en México, tal como lo expresaron desde el domingo, día en que se le tributó a José José un homenaje en Miami abierto al público y al que asistieron miles de personas.
De acuerdo con medios locales, ambos vástagos habían presentado un recurso legal para detener la incineración, si bien ello no se ha confirmado.
«Que lo enterraran con su mami en el Panteón Francés ubicado en la Ciudad de México», pidió José Joel en una entrevista que concedió a la cadena hispana Univisión y emitida hoy.
La cremación sin embargo ha sido decidida por la viuda, Sara Salazar, y la hija menor, Sarita, según ellas atendiendo un deseo del intérprete, e incluso está prevista que se haga el martes.
El anuncio de la cremación se dio luego de que el pasado 1 de octubre, y tras varios desencuentros, los tres hermanos sostuvieran una reunión en la sede del consulado, y con intermediación del cónsul, Jonathan Chait, en la que se acordaron exequias de cuerpo presente tanto en Miami como en Ciudad de México.
Tal como se informó a través de un comunicado de prensa emitido luego de aquella reunión por la Secretaria de Relaciones Exteriores de México, José José será objeto de homenajes en el Palacio de Bellas Artes y en el Auditorio Nacional.
Este lunes, fuentes de la Presidencia mexicana precisaron que serán la mitad de las cenizas del cantante las que llegarán el miércoles a Ciudad de México procedente de Miami, donde falleció el 28 de septiembre.
La noche del domingo, José Joel reconoció que aceptaron «a regañadientes» la última disposición en torno a los restos de su padre y sabiendo que Sara Salazar, viuda de José José, es la única legalmente autorizada para decidir sobre el futuro del cuerpo.
Nacido en la Ciudad de México en 1948, en el seno de una familia de músicos, José José anunció en 2017 que padecía un cáncer de páncreas y se trasladó a Miami a comienzos de febrero 2018 para recibir tratamiento.
A su llegada a esta ciudad del sur de Florida quedó al cuidado de su hija Sara hasta su deceso ocurrido en un hospital.
Los hijos mayores acusaron a su media hermana tener incomunicado al intérprete de «El triste», canción con la que dio el salto a la fama internacional en 1970.
Posteriormente, a su llegada a Miami para ver el cuerpo de su difunto padre, José Joel y Marysol visitaron dos funerarias, un hospital y una comisaría en busca de los restos mortales del cantante, sin obtener resultados.
Los tres hermanos finalmente hicieron las paces, momentáneamente, gracias a la mediación del cuerpo diplomático de México en Miami y se acordó que este icono de la música romántica en español sea despedido tanto en su país natal como en Miami, donde había residido en la última etapa de su vida.
En un mar de desacuerdo, todavía se desconoce que pasará con las cenizas del cantante mexicano, luego de una semana y media de su fallecimiento.
EFE
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