Caracas.- Venezuela acoge desde este lunes hasta el miércoles la Cumbre Internacional contra el Fascismo, en la que, según las autoridades, participan «cerca de 200 invitados de 52 países», para conmemorar el vigésimo aniversario del golpe de Estado contra Hugo Chávez, el 11 de abril de 2002.
En la inauguración del cónclave, el ministro de Relaciones Exteriores, Félix Plasencia, explicó que, durante estos tres días, los asistentes celebrarán «el rechazo del pueblo» al intento de sacar del poder a Chávez.
«Vamos a celebrar el rechazo del pueblo que decidió que no había espacio para frustrar o extirpar un proyecto político que nacía y se empeñaba en la dignificación de la vida de los venezolanos», manifestó Plasencia, según recoge un comunicado difundido por la Cancillería.
El funcionario subrayó que, hace 20 años, se dio «un golpe de Estado vergonzoso, traidor, contra una propuesta que saldaba la deuda histórica del daño hecho a la mayoría de los venezolanos, a quienes se les había apartado de sus derechos a una vida armoniosa, de felicidad, en paz y digna».
Plasencia estuvo acompañado en la instalación del evento por la socióloga e investigadora brasileña Sabrina da Fonseca Borges, el alcalde de la comuna de Recoleta de Santiago de Chile, Daniel Jadue, y el político estadounidense Eugene Puryear.
En su intervención, Fonseca Borges, quien calificó como «fascista» al Gobierno brasileño, presidido por Jair Bolsonaro, explicó que la gestión de la pandemia por parte del mandatario «ha arrojado como saldo más de 600.000 personas fallecidas, crecimiento de la violencia y el hambre, y destrucción de la naturaleza».
Por su parte, Jadue felicitó al pueblo venezolano por «todos los años de resistencia» en los que «ha podido sortear una presión internacional y un intervencionismo extranjero que ha sido brutal», en referencia a las sanciones de EE.UU. y otras naciones sobre Venezuela.
Por último, Puryear, dirigente del Partido por el Socialismo y la Liberación de Estados Unidos, explicó que existe «una variante particular del fascismo que está impresa en la cultura política» de su país y que va hacia «las raíces de la limpieza étnica de los pueblos indígenas, del encarcelamiento de africanos, del fervor religioso que tienen los anticomunista».
Explicó que la «nueva mentalidad de guerra» de EE.UU. contra Rusia y China responde a «una construcción ideológica del fascismo», que relacionó con la postura de considerarse «el mejor de todos los países del mundo y querer mantener esa supremacía a toda costa».
Está previsto que la cumbre concluya el miércoles, 13 de abril, fecha en la que los venezolanos recuerdan el regreso de Chávez a la Presidencia, tras el golpe de Estado de dos días antes.
EFE
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