A veces mi mente me lleva al punto de mirar totalmente hacia afuera:
Mira lo que este ha hecho
Mira lo que el otro ha logrado
Mira todo lo que todos han avanzado
¿Y tú? Ahí viendo como el mundo pasa ante tus ojos, eso me dice esa vocecita macabra que juega a enloquecerme.
En ese momento las arterias de mi sien empiezan a sentirse palpitando bastante rápido, mi respiración se entrecorta un poco y la sensación de fracaso recorre mi cuerpo.
Es ahí cuando de repente suuuaaass un rayito de luz entra en forma de voz y me pregunta ¿Qué estás haciendo?, ¿Otra vez tu en lo mismo?, ¿Otra vez tu comparándote y mirando hacia fuera cuando tu mayor provecho lo sacas cuando miras hacia dentro?.
¿A cuántos les ha pasado esto?
¡Ey! esta ha sido una de mis grandes luchas lo confieso.
El no compararme
El no latigarme
El no autocastigarme
El no autoflagelarme
Es que pareciese que para mi, nunca soy suficientemente buena ¿Te ha pasado?
No soy tan buena para escribir
No soy tan buena para hablar
No soy tan buena para vender
No soy tan buena mamá
No soy tan buena esposa
No soy tan buena hija
Quién inventó ese «TAN BUENA» ¡Que se vaya a la quinta paila del infierno!
¿Qué medidor es ese?
O eres buena/o o no en algo y siempre, óyeme bien, siempre serás suficiente, Dios no hace nada a medias.
De todos modos, yo siempre me paso mi manito y no me dejo vencer por esa vocecita intrépida y malvada que me hace creer que yo no soy SUFICIENTE, que yo no soy tan buena.
A lo mejor alguna maestra, alguna amiga, mi hermana mayor o mi madre me lo dijo alguna vez, cuando era tan inocente como para refutar esa idea.
Pero ya no más, ya soy adulta y me revelo en contra de esa tontería de no ser suficiente o no ser tan buena.
Por eso quiero darte 3 instrucciones que si las sigues al pie de la letra, te ayudarán a vencer esas trampas que te coloca tu mente. Funcionan, yo lo he comprobado.
1. REALIZA AFIRMACIONES POTENCIADORAS (SOY SUFICIENTE Y SOY REALMENTE BUENA)
Eso decidí empezar a decirme cada vez con mayor frecuencia. A mi las afirmaciones me han funcionado muy bien, por eso siempre coloco una idea opuesta a esa limitante que mi mente me asoma. Estoy atenta a lo que me dice la voz macabra y la escribo, luego sustituyo ese pensamiento por uno opuesto y potenciador y a partir de ese punto empiezo a repetirme como radio loco esta nueva afirmación, todo el tiempo a cada momento.
Ahí empieza esa batalla mental entre el bien y el mal y ustedes ya saben, el bien siempre vence sobre el mal.
2. TRAZA OBJETIVOS QUE TE LLEVEN A AFIANZAR TU NUEVO PENSAMIENTO.
La afirmación es como la tabla de tu mesa, ahora necesita de 4 objetivos con sus acciones que le den soporte a la mesa, entre mis patas de la mesa están: ESCRIBIR MI LIBRO, CONFERENCIAR, ASESORAR Y ENSEÑAR, de hecho escribir este y mis demás artículos forman parte de las acciones que le dan solidez a las patas de mi mesa y también soportan mi afirmación.
3. PON EN DUDA LO QUE TU MENTE TE DICE:
Hoy te digo con total certeza, no siempre tu mente tiene la razón, pon en duda esas locas ideas saboteadoras y decide creerle solo lo bueno que dice de ti. Tu inconsciente ha almacenado demasiada porquería que puede limitarte y anclarte, impidiéndote que avances, es por ello que tienes que dudar de esas ideas e iniciar un proceso de depuración un poco más profundo.
Para eso es necesario que seas tu mejor cuidador o cuidadora, mientras más limpies tu mente evitarás que la yerba mala se apodere de toda la belleza que hay en tu jardín mental. Te maravillarás de los resultados.
Ahora bien, si tu al igual que yo te has pillado en este macabro episodio mental, hoy quiero decirte a ti:
ERES SUFICIENTE y además
ERES BUENA/O EN LO QUE HACES,
TE MERECES LOGRARLO
Así que es momento de empezar a sustituir esa idea limitante, dejar de compararte y empezar a creer lo que te digo así por momentos te invada la duda.
Quizá ahora mismo no me comprendas pero si sigues al pie de la letra cada instrucción que menciono arriba, podrás obtener resultados grandiosos que luego me contarás.
Esta es mi recomendación de hoy, no me quiero despedir sin antes desearte un bendecido lunes y agradecerte por siempre leerme y acompañarme en mi proceso de transformarme y transformarte.
Con amor,
Coach Bárbara Ortega
@coachbarbaraortega
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