Las Vegas, Nevada. Para escribir su historia, Saúl Álvarez no puede partir desde páginas en blanco. Hay un largo historial de guerreros mexicanos con quienes ser comparado, lo que significa un gran peso sobre sus hombros. Pero con cada combate, el tapatío escala un lugar más alto en el boxeo mundial y toma su lugar entre todos esos grandes boxeadores del pasado.
El sábado en la noche subió otra división para buscar un cuarto cinto en categorías diferentes, una hazaña complicada pero que Álvarez tomó con mucha paciencia y cálculo. Una pelea difícil y pareja terminó de forma dramática con uno de los nocauts más impresionantes del año en el round 11. Álvarez consiguió el campeonato mundial de las 175 libras y ahora puede exhibir ese cinto en sus vitrinas junto con otros ocho que ha ganado a lo largo de su carrera en cuatro clases de peso.
No es poco lo conseguido por “Canelo”, ya que se convierte en apenas el cuarto mexicano en conquistar, por lo menos, una corona en cuatro divisiones diferentes y se une a un club que ya la prensa local ha empezado a denominar “Los Cuatro Fantásticos” junto con Jorge “Travieso” Arce, Erik “Terrible” Morales y Juan Manuel “Dinamita” Márquez.
El mexicano consiguió la victoria a los 2:15 minutos del undédimo asalto de la pelea disputada en el «MGM Grand Garden Arena», en Las Vegas (Nevada).
Álvarez, actual campeón mundial de peso mediano, subió 15 libras y dos divisiones de peso para conseguir su cuarta división y unirse a algunos de los mejores de todos los tiempos del boxeo.
El mexicano también se convirtió en el cuarto extitular de peso mediano junior en ganar un cinturón en peso semipesado, una diferencia de 21 libras (de 154 a 175).
Los otros pugilistas que están consagrados en el Salón de la Fama del Boxeo Internacional son Sugar Ray Leonard, Thomas Hearns y Mike McCallum.
También se convirtió en el primer boxeador mexicano en ganar títulos en cuatro categorías de peso antes de cumplir los 30 años de edad (29 años y 107 días).
Sus compatriotas Rafael Márquez tenía 38 años y 234 días; Erick Morales 35 años y 16 días, y Jorge Arce con 32 años y 122 días.
Álvarez, de 29 años, que posee marca de 53-1-2, y 36 nocáuts, ha ganado títulos en peso mediano junior, mediano y súper mediano.
El «Canelo» ya es el segundo mexicano en ganar un título de peso semipesado; el fallecido Julio González lo ganó a finales del 2003.
Álvarez debió buscar la forma de entrar a distancia para alcanzar a Kovalev, de 36 años, que tiene marca de 34-4-1, con 29 nocauts, y mayor envergadura y estatura que el mexicano.
Mientras Kovalev trataba de mantener al mexicano a distancia con su largo y poderoso jab, Álvarez debió forzar la pelea para entrar a la guardia del ruso.
Cuando el mexicano pudo encontrar su distancia empezó a anular al ruso, que no tenía respuesta para el combate en corto.
El «Canelo» castigó con ambas manos y a distancia media para abrir la guardia del ruso, quien con su mejor arma, el jab, trataba de contenerlo.
Cada uno trataba de realizar el combate que más le convenía, y no fue sino hasta el sexto asalto cuando el «Canelo» obligó al ruso a retroceder castigándolo con ganchos y potentes izquierdas a la cabeza.
El séptimo y octavo episodios también los dominó el mexicano con ganchos, mientras que Kovalev trataba de abrazarlo para tener un respiro.
En el noveno Kovalev parecía recuperar la forma y volvió a desplegar con potencia su jab para contener al mexicano.
Con esa táctica el ruso logró un excelente décimo asalto, con un trabajo depurado de su directo de izquierda que mantenía a distancia a Álvarez y al mismo tiempo lo castigaba con buenos golpes.
En el undécimo asalto Kovalev parecía confiado en empezar a dominar las acciones, pero Álvarez cambió la táctica de pelea y consiguió castigarlo con dos potentes golpes.
Lo alcanzó con un gancho izquierdo en la barbilla que lastimó a Kovalev, quien apenas pudo mantenerse de pie, y siguió con otro con la mano derecha también a la barbilla que mandó a la lona al ruso.
El árbitro Russell Mora inmediatamente dio por concluida la pelea y otorgó la victoria al mexicano ante el delirio de los 14.490 espectadores que presenciaron la pelea.
Redacción SNPD
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