San Félix.-La entrada del municipio Caroní es un vertedero de basura, desde el semáforo del sector El Rosario, hasta el final de la avenida Manuel Piar.
Escombros y alimentos descompuestos producen olores fétidos en este sitio, también, a un extremo del mercado municipal Chirica.
Cientos de vendedores y consumidores, se abren paso entre la basura, unos ofreciendo sus productos; mientras que otros buscando precios accesibles.
“Uno de los graves problemas es que el aseo urbano dejó de entrar a las comunidades y la gente saca el desecho que genera en sus viviendas hasta la avenida”, acotó Gustavo Urdaneta.
Otro viandante apuntó: “no podemos quedarnos con la basura en nuestras casas. La única alternativa que nos queda es echarla en la isla de la Manuel Piar”.
Los desechos sólidos tras descomponerse, produce malos olores, igual, atraen a las moscas, cucarachas, zamuros y perros callejeros que buscan alimentos entre la porquería.
Vendedores de verduras, pescado, pollo, legumbres y otros, desechan el residuo en la calle, todo se mezcla con las aguas servidas que corren por las aceras; en tanto que las moscas revolotean en los alimentos.
“La alcaldía tiene días que no recoge la basura. Cuando la recolecta, a los pocos minutos se llena la isla de desechos”, exclamó un vendedor de huevos.
Bladimir Martínez Ladera
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