Los residentes en la parroquia Cachamay han tenido que lidiar con un suministro de agua intermitente desde el mes de enero, sin recibir, hasta ahora, una respuesta esperanzadora de la Hidrológica del estado Bolívar (Hidrobolívar).
Desde que inició este año 2025, Hidrobolívar ha implementado un racionamiento de dos turnos en Cachamay de cuatro horas cada uno.
«¿Por qué nadie habla del problema del agua en la parroquia Cachamay?», se pregunta Patricia Valenzuela, sabiendo que todos los guayaneses lidian con esta coyuntura.
Valenzuela, que vive en Villa Brasil declaró que no les están suministrando agua en las noches.
«Apenas podemos aprovechan del recurso en un turno de cuatro horas por la mañana», dijo.
Asimismo, expresó que «nada asegura que ese horario se cumpla, pues las posibilidades de que no les llegue son altas».
La falta de una solución efectiva sugiere que un problema serio con el abastecimiento de agua en la ciudad, haciendo que los ciudadanos deban recoger el liquido en tambores, pipotes y recipientes, actividad que se ha vuelto rutinaria afectado por completo la dinámica de los habitantes.
El agua: problema de años atrás
Para la década de los 90, una parte de los venezolanos enfrentaban problemas con el servicio de agua, sin embargo, en 2001 el Instituto Nacional de Estadísticas informó que el 70 % de los municipios del país lidiaban con deficientes en el mencionado servicio.
La situación se agudizó con el pasar de los años. Para 2015, Hidrobolívar inició el racionamiento del suministro de agua en todo el país, mientras que el uso de cisternas se popularizaba como solución «provisional», convirtiéndose en permanente.
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