Houston, Estados Unidos. El béisbol profesional de las Grandes Ligas se encuentra de luto este jueves tras el fallecimiento de Eddie Kasko, exjugador estrella y manejador de los Medias Rojas de Boston, y expelotero de los Astros de Houston, que murió a la edad de 88 años.
Los Medias Rojas, que dieron a conocer el fallecimiento, tuvieron a Kasho durante casi tres décadas en una variedad de roles.
Su poder ofensivo le permitió liderar a los Rojos con siete imparables durante sus cinco derrotas ante un poderoso equipo de los Yanquis de Nueva York que entonces tenían a los legendarios Mickey Mantle, Roger Maris, Yogi Berra y Whitey Ford.
Después de pasar su última temporada en el campo con los Medias Rojas, el nativo de Nueva Jersey se quedó en la organización para administrar su club Triple-A desde 1967-69.
Kasho fue contratado como manejador de las Grandes Ligas del equipo de Boston con solo 38 años, en octubre de 1969, y guió a los Medias Rojas a un récord ganador en cada una de sus cuatro temporadas al frente de la franquicia desde 1970-73, y nunca terminó peor que ocho partidos por encima de .500.
Al concluir su carrera como manejador con los Medias Rojas tuvo una marca de 345-295, empatado con Joe Cronin por el quinto mejor porcentaje ganador (.539) entre los pilotos de los Medias Rojas que duraron al menos 500 partidos con el equipo.
Kasko luego pasó 21 años en la oficina principal de Boston como seguidor de talento (1974-77), Director de Scouting (1978-92) y Vicepresidente de Desarrollo de Béisbol (1992-94).
El equipo dijo que «jugó un papel fundamental» en la firma de estrellas como Roger Clemens y Mo Vaughn.
Después de 29 años con la organización de los Medias Rojas, Kasko fue incluido en el Salón de la Fama del club en el 2010.
Kasko irrumpió en las grandes ligas con los Cardenales de San Luis antes de pasar cinco temporadas con Cincinnati. También jugó para Houston, siendo el primer capitán de la franquicia en 1965.
Un bateador diestro, Kasko, un nativo del estado de Nueva Jersey, que estuvo en la Guerra de Corea (1952-54), bateó .264 con 22 cuadrangulares y 261 carreras impulsadas en 1.077 partidos de Grandes Ligas, haciendo 483 aperturas en el campocorto, 361 en tercera base y 47 en segunda base.
Su mejor temporada ofensiva fue con los Rojos en 1960 cuando bateó .292 con seis vuelacercas y 51 carreras impulsadas. EFE
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