Sao Paulo.- Una antigua fábrica desactivada en Sao Paulo, la mayor ciudad de Brasil, alberga la exposición de arte «Drivethru.Art«, la primera muestra del país en la que las personas no necesitan salir del carro para apreciar las obras.
Con museos y galerías de arte cerrados por el aislamiento impartido para evitar la propagación del nuevo coronavirus y en una iniciativa similar a la que adoptaran las comercializadoras de cine.
En total son 18 pantallas gigantes que presentan obras de pintura, fotografía y arte digital para ser disfrutadas desde los automóviles, una muestra a la que también pueden acceder quienes no dispongan de vehículo, usando los dispuestos por los organizadores, con conductores altamente protegidos para evitar posibles contagios.
«Es un intento de dar un aire a la ciudad a través del arte y de la cultura, con base en una selección que se hizo del trabajo de esos artistas, con temas que fueron fortificados durante la pandemia y que son importantes para abordar durante la exposición», comentó Luiz Maluf, comisario de la muestra.
Sao Paulo, con unos 17 millones de habitantes, es el epicentro de la pandemia en Brasil y aunque sus cifras se han mantenido estables en los últimos días, la capital paulista ya bordea las 10.000 víctimas por COVID-19 y sobrepasa los 200.000 infectados.
De acuerdo con Maluf, «en medio del caos que se está viviendo», se buscó «volver esta exposición accesible para todos, incluso para quien no tiene carro y viene en transporte público», poniendo a disposición vehículos sin ningún costo adicional y «con todas las normas de seguridad exigidas en este momento».
Para el comisario, lo más destacado de la propuesta en el espacio Arca del barrio Vila Leopoldina fue que se trató de una exposición «pensada, planeada y creada dentro de la pandemia. No fue adaptada», y cuenta con una guía de audio para acompañar la explicación de las obras a través de una aplicación de telefonía celular.
Maluf recalcó que la muestra se basa en la «diversidad» con propuestas de artistas con recorrido en diferentes galerías y otros que hacen su primera exposición, pero todos abordando «asuntos de género, intersexualidad, medioambiente, mujeres, cultura indígena, con un discurso expositivo de sus investigaciones contemporáneas».
La visitante Patricia Magalhaes elogió la propuesta, que «aproxima» nuevamente a las personas a las que les «gusta apreciar el arte», mientras que su amiga Daiane Regina valoró el hecho de «poder salir de casa», justo para tener contacto con las manifestaciones artísticas condensadas en la inédita exposición.
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