EFE
Nairobi.- La primera Asamblea de ONU-Hábitat, el Programa de las Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos, empezó hoy en Nairobi bajo la presidencia de México y con el objetivo de impulsar una urbanización sostenible en el mundo.
«Este es un momento muy significativo e histórico para todos, esta es la primera sesión de la primera Asamblea de ONU-Hábitat», dijo la directora ejecutiva del organismo, Maimunah Mohd Sharif, en la apertura del evento en la sede de la ONU en la capital de Kenia.
La primera decisión fue elegir el país que será el presidente de la Asamblea, responsabilidad que, por unanimidad, recayó en México, representado por la subsecretaria para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de México, Martha Delgado.
«Si lo manejamos correctamente, el urbanismo tiene el potencial de proporcionar oportunidades para una mejor vida», subrayó la nueva presidenta de la Asamblea, quien afirmó que para México «lo urbano es ahora una prioridad».
Por su parte, el presidente de Kenia (país que acoge la sede de ONU-Hábitat), Uhuru Kenyatta, dio la bienvenida a todos los representantes en calidad de anfitrión, y recordó que «en casi todas las partes del mundo las sociedades no están preparadas para la rápida urbanización que se está produciendo».
A la reunión, que se celebra hasta este viernes, asistirán los primeros ministros del Yemen, Ahmed ben Dagher; y Fiji, Frank Bainimarama, así como el presidente de Sudán del Sur, Salva Kiir, y unos 3.000 representantes gubernamentales, de consistorios y del sector privado de más de cien países.
Bajo el lema «Innovación para una mejor calidad de vida en ciudades y comunidades», la Asamblea es el foro más importante de toma de decisiones a nivel mundial en los ámbitos de urbanismo sostenible y asentamientos humanos.
Durante esta semana, los gobiernos de todo el mundo se reunirán en la sede de la ONU en Nairobi para comprometerse a hacer ciudades más habitables, sostenibles, ecológicas e igualitarias.
Actualmente, el 55 % de la población mundial vive en ciudades, una cifra que se espera que aumente hasta el 68 % para 2050, y sin embargo el 60 % de las infraestructuras que se necesitarán en las urbes para 2030 aún no se han construido, según datos de la ONU.
Esto quiere decir que, según cálculos de la ONU y la Organización Internacional para las Migraciones, alrededor de 3 millones de personas se mudan a una ciudad cada semana.
La Asamblea, cuya celebración se decidió el pasado diciembre como un mecanismo para reforzar el papel de ONU-Hábitat, tendrá lugar desde ahora cada cuatro años.
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