En 2019, el Atlético de Madrid acordó desembolsar 127 millones de euros por el joven delantero portugués.
En cuanto a Enzo, se fue al Chelsea en los últimos segundos del 31 de enero a cambio de 121 millones de euros, lo que lo convierte en la adquisición más alta de la Liga inglesa.
El Benfica adquirió en julio pasado el mediocentro al River Plate por 10 millones de euros y ahora recibe una cantidad astronómica.
En su corta estancia en Portugal, Enzo se exhibió en Europa, se ganó un puesto en la selección y brilló en la victoria de la «albiceleste» en el Mundial de Qatar, donde incluso fue elegido el mejor jugador joven de la competición.
También el River Plate se benefició del acuerdo entre el Benfica y el Chelsea, que recibirá 24 millones de euros.
El presidente del club porteño, Jorge Brito, lo definió como «un gran logro».
«Nunca pensamos que sería un traspaso de 120 millones», dijo recientemente en declaraciones citadas por el diario argentino Olé y ampliamente difundidas por la prensa portuguesa.
El modelo de contratación que suelen utilizar los equipos lusos beneficia a clubes como el River, que tienen la posibilidad de retener un mayor porcentaje del pase de sus jugadores y recibir una mayor suma de dinero por un futuro traspaso.
Lo mismo ocurrió con el Almería, al que el Benfica adquirió al delantero uruguayo Darwin Núñez en 2020 por 24 millones de euros.
En su segunda y última temporada en Lisboa, el internacional ‘charrúa’ fue letal y se convirtió en el ‘pichichi’ de la Liga portuguesa.
Poco después, Núñez ponía rumbo a Anfield Road para defender los colores del Liverpool tras 75 millones de euros más 25 en variables.
10 millones ya fueron a parar a las arcas de la entidad andaluza, que se quedó con el 20% de su pase, mientras que el Peñarol uruguayo recibió unos 3 millones por ser su equipo de formación.
TALENTO «MADE IN SEIXAL»
A pesar de la abultada cifra, Enzo Fernández no fue la mayor venta de la historia del Benfica.
La mayor fue Joao Félix, uno de los muchos talentos salidos del «Campus Benfica», la academia y centro deportivo del equipo situado en Seixal, a unos 25 kilómetros de Lisboa.
Pep Guardiola parece ser un gran admirador de esta cantera, ya que tiene a varios de sus «alumni» en el Manchester City: Bernardo Silva, Rúben Dias, João Cancelo o Ederson.
Dias y Ederson pasaron directamente del Benfica al City por unos 71 y 40 millones de euros, respectivamente.
«DESCUENTOS» DEL BENFICA
En cambio, Silva y Cancelo (ahora cedido al Bayern de Múnich) no fueron ventas tan acertadas, sobre todo teniendo en cuenta el nivel de estos jugadores y las gigantescas sumas de hoy en día.
El primero fue adquirido por el Mónaco en 2014 por 15 millones, la misma cantidad que el Valencia pagó al Benfica por Cancelo un año después.
Si se compara con el estado actual del mercado, varias de las ventas de los encarnados parecen con «descuento».
El argentino Ángel Di María, también campeón del mundo, marchó al Real Madrid en 2010 por 33 millones; el brasileño David Luiz se fue al Chelsea ese mismo año por 25; y el Atlético de Madrid se hizo con el esloveno Jan Oblak por 16 en 2014.
Ahora, el club portugués ha «blindado» a los jugadores más prometedores de su plantilla.
Su goleador, el luso Gonçalo Ramos, tiene una cláusula de 120 millones, mientras que quien quiera llevarse al defensa António Silva tendrá que pagar 100 millones, según la prensa local.
A ellos se suman los últimos fichajes, el noruego Andreas Schjelderup y el danés Casper Tengstedt, ambos delanteros y también con cláusula de 100 millones.
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