Evangelio del Día: Mateo 23,23-26

En aquel tiempo, Jesús dijo a escribas y fariseos: ¡Ay de ustedes, maestros de la Ley y fariseos, que son unos hipócritas! Ustedes pagan el diezmo hasta sobre la menta, el anís y el comino, pero no cumplen la Ley en lo que realmente tiene peso: la justicia, la misericordia y la fe.

Ahí está lo que ustedes debían poner por obra, sin descartar lo otro. ¡Guías ciegos! Ustedes cuelan un mosquito, pero se tragan un camello. ¡Ay de ustedes, maestros de la Ley y fariseos, que son unos hipócritas! Ustedes purifican el exterior del plato y de la copa, después que la llenaron de robos y violencias.

¡Fariseo ciego! Purifica primero lo que está dentro, y después purificarás también el exterior.

Reflexión del Evangelio

La Iglesia Universal celebra hoy la fiesta entre otros santos en honor a Santa Mónica. quien es puesta por la Iglesia como ejemplo de mujer cristiana, de piedad y bondad probadas, madre abnegada y preocupada siempre por el bienestar de su familia, aun bajo las circunstancias más adversas.

Es la madre de San Agustín, y logró la conversión de este y la de su esposo al cristianismo, por su constancia y oración, por eso es la patrona de las madres, esposas y viudas. Nació el año 332 en Tagaste, África y murió en Ostia el año 387.

Liturgia del Día

La liturgia del día medita los textos: 2Ts 2,1-3.13-16; Sal 95; y el Evangelio de Nuestro Señor JESUCRISTO, Según San Mateo capítulo 23, del verso 23 al 26. En el que JESÚS, le hace un llamado de atención a los fariseos, por estar pendientes de detalles superfluos, pero no van al sentido profundo de las exigencias de la Ley que son la Justicia, la Misericordia y la Fidelidad.

Por eso JESÚS los llama hipócritas, porque en su fanatismo religioso, terminan por caer en lo que ellos mismos critican. Ya que el deseo de pureza y perfección, cuando no están fundamentado en la caridad e iluminado por el Espíritu de DIOS, conducen a la perdición.

Muy pertinente es destacar que no todos los fariseos actuaban mal, ni eran hipócritas, pero JESÚS hace esta denuncia porque la mayoría de ellos, practicaban, enseñaban, y conseguían nuevos adeptos para la comunidad judía, pero por más que ayunaran y dieran limosnas, no se deshacían de su orgullo y de su amor al dinero.

Y es esa su hipocresía, la de pretendan guiar a los demás, en nombre de DIOS, sin hacer las cosas como Él las ha establecido, donde la Justicia y la Misericordia sean sus puntos cardinales, por lo que es inútil querer estar limpios por fuera, sin estarlo por dentro.

Interpelación de Jesús muy personal

Al confrontarnos con el texto vemos que, JESÚS nos interpela de manera personal y comunitaria, ya que son muchas las ocasiones en que las preocupaciones por lo externo, por las apariencias y por el que dirán, se convierten en lo fundamental, mientras descuidamos las vivencias de la Misericordia, de la Justicia y de la Caridad, que son los ejes fundamentales de la Propuesta del Maestro, para todos sus seguidores, de todos los tiempos.

Interpelación muy oportuna, ya que seguramente que muy pocas veces nos hemos puesto a reflexionar sobre el daño que le hemos ocasionado a nuestro compromiso cristiano, cuando separamos fe y vida, cuando las exigencias éticas que le hacemos a los demás no se parecen en nada a la doble moral que tenemos en nuestras actuaciones cotidianas, lo que nos hace inferir que el testimonio y la coherencia son unas asignaturas que la mayoría de los cristianos tenemos aplazadas.

Conclusión que nos da tristeza, porque ¿Cómo va a creer el mundo en DIOS si nosotros mismos no somos capaces de Anunciarlo con nuestro estilo de vida? ¿Cómo va a creer el mundo en la Iglesia, si los creyentes vivimos como si no lo fuéramos? ¿Cómo construir un mundo justo, fraterno y en paz, si nuestros corazones están llenos de egoísmos, de rencores y de envidias?

Aprender a discernir

Por eso es que, JESÚS con esta enseñanza de hoy, invita a adversarios y partidarios, a que aprendamos a discernir a partir de los valores del Reino, para construir un mundo más humano.

Porque solo un cambio operado desde la conciencia, donde el AMOR y la Misericordia son las fuerzas que impulsan el Accionar del ser humano, y pueden garantizar la transformación de las realidades de injusticia del mundo terreno.

Señor JESÚS, ayúdanos a Configurarnos Contigo, para que nuestros gestos de amor y de servicio, no sean fingidos, ni contengan intereses ulteriores, sino que sean una auténtica vivencia de nuestra identidad cristiana.

Amén.