En un simpático ambiente de agradecimiento, la fundación Me Diste de Comer celebró su vigésimo cuarto aniversario con una misa de acción de gracias en la iglesia Sagrada Familia, el pasado 14 de agosto.
El evento reunió a todos los comensales que visitan a diario el lugar, sus voluntarios y los diversos benefactores que han acompañado con su labor y ayuda, a lo largo de estos 24 años de caminar de la fundación sin fines de lucro.
Carlos Jorge Corinaldesi, director de la fundación, explicó para el equipo de Nueva Prensa Digital que desde hace más de 20 años a través de esta fundación, ellos han intentado solucionar las necesidades de las personas más vulnerables de la ciudad.
Asimismo, dijo que de manera muy esperanzada, espera de esta generación de relevo que puedan levantar este país.
«En la misa se hablaba sobre estos comedores, que deberían desaparecer. Porque tenemos un país tan rico, donde debería estar esa distribución para todos de una manera equitativa, y nadie tendría que estar recibiendo un plato de comida de otro, ni recibiendo migaja», expresó.
Sin embargo, hizo hincapié en la responsabilidad que asumió hace un tiempo con esta fundación, asegurando que seguirá con ella «hasta que Dios lo permita».
Me Diste de Comer
La fundación Me Diste de Comer nació un 14 de agosto de 1999, hasta entonces es un lugar que ha tomado mucho valor en Ciudad Guayana, y que ha podido expandirse a lo largo de ella, atendiendo diariamente a niños, jóvenes y adultos en pobreza extrema.
En la actualidad, cuentan con tres sedes: la principal ubicada en Unare II de Puerto Ordaz, y otras dos ubicadas en Brisas del Paraíso y San José de Chirica, en San Félix.
Corinaldesi contó que entre los tres comedores entregan diariamente 500 almuerzos. Además, detalló que en la sede de Unare, benefician a los comensales con un desayuno, y al día reparten alrededor de 120.
La sede principal cumple con un primer horario a las 9:30 a.m, cuando se entrega el desayuno que, diariamente, es arepa con fororo o avena.
Mientras que al mediodía las tres abren sus puertas a las 12:00 p.m, para entregar el almuerzo.
«No teníamos más nada que cocinar»
El director de la fundación recordó con mucha nostalgia que hace unos 40 días pasaron por una situación bastante complicada, «no teníamos más nada que cocinar».
No obstante, contó que hizo un llamado por las redes sociales y medios de comunicación para solicitar ayuda a toda la colectividad guayanesa, y fueron muchas las personas que se manifestaron.
«Parece que el Señor toca siempre los corazones de las personas y aquí estamos nuevamente, en la lucha, en la pelea», instó.
Colaboración
Corinaldesi manifestó que constantemente reciben colaboraciones de algunas ferias de hortalizas. Pero aclaró que siempre necesitan huesos para sopa y verduras, como: yuca, auyama y ocumo.
También comentó la situación de la falta de mantenimiento de las neveras, cocinas y aires acondicionados que tienen en la sede, aclarando que con el tiempo muchos de ellos se han ido dañando.
Por eso, ante esta vicisitud, aprovechó nuevamente de hacerle un llamado a las personas que quieran hacer su aporte, para la continuidad de esta noble labor.
Se pueden comunicar directamente con el fundador de la fundación a través de sus números de contacto 0414-8589915 o por medio de su cuenta de Instagram @fmedistedecomer
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