El Gobierno peruano decretó desde este jueves un duelo nacional, que se prolongará por tres días, debido a la muerte del expresidente Alberto Fujimori, fallecido el miércoles a los 86 años.
El decreto supremo fue publicado poco después de la medianoche en el diario oficial El Peruano y también decide otorgar a Fujimori «las honras fúnebres que corresponde al presidente de la República en ejercicio».
Durante estos tres días, el pabellón nacional será izado a media asta en todos los edificios públicos, instalaciones militares, bases, buques, locales policiales y demás dependencias del Estado, así como en las delegaciones diplomáticas.
Poco después de conocerse el deceso de Fujimori, el primer ministro, Gustavo Adrianzén, detalló que se había puesto en contacto con los parientes del expresidente para coordinar su funeral, de acuerdo al protocolo oficial.
«Queremos expresar nuestras condolencias a familiares, amigos y partidarios de quien fuera el presidente Alberto Fujimori», dijo en una rueda de prensa Adrianzén.
Inmediatamente a continuación, comentó que «las autoridades tomarán contacto con la familia para que, en coordinación con ellos, se decida cuál es la voluntad».
El ceremonial de Estado peruano recoge que, al conocerse el fallecimiento de un expresidente, se izará a media asta el pabellón nacional y se decretará duelo oficial el día de la inhumación de los restos mortales.
El traslado de su cuerpo al lugar del velatorio se realizará en privado, pero las exequias se celebrarán con asistencia oficial.
Asimismo, recoge que el cortejo fúnebre será encabezado por la presidente o su representante y los deudos del extinto.
Para el funeral se rendirán los mismo honores que al presidente, previa emisión del dispositivo legal respectivo.
Partidarios de Fujimori se concentran en su casa para lanzar «vivas» en su memoria
Grupos de seguidores del expresidente peruano Alberto Fujimori (1990-2000) se congregaron este miércoles frente a su residencia en Lima para expresar su dolor tras su fallecimiento y rendir homenaje a su legado.
Carteles con la imagen de Fujimori y el mensaje de «nunca te olvidaremos» y «presidente del bicentenario» aparecieron en las inmediaciones del domicilio, en medio de las vivas lanzadas por sus partidarios.
Asimismo, otras personas se acercaron al lugar para rezar de rodillas y con imágenes religiosas en mano en memoria del difunto exgobernante, fallecido este miércoles a los 86 años a consecuencia del cáncer que padecía.
«Fujimori está presente» y «Gracias chino», eran los lemas que los partidarios repetían, algunos vestidos con prendas color naranja, el distintivo del partido Fuerza Popular, fundada por su hija y heredera política Keiko Fujimori.
El congresista y médico de cabecera de Fujimori, Alejandro Aguinaga, declaró a la prensa, en los exteriores de la casa, que el exmandatario falleció a las 18.10 hora local (23.10 GMT) «en el calor del hogar, de sus hijos, de sus nietas y del personal que trabajamos con él».
Explicó que Fujimori estuvo hace unos días en la clínica Delgado, de Lima, recibiendo la última etapa de su tratamiento ambulatorio contra el cáncer de lengua, diagnosticado a inicios de este año.
A su vez, el médico oncólogo José Carlos Gutiérrez detalló que, en febrero pasado, confirmaron que el cáncer de lengua de Fujimori no era operable por la localización y el tamaño que presentaba, por lo cual se decidió tratarlo con radioterapia y quimioterapia por seis semanas.
Cuando estaba en pleno tratamiento, Fujimori se cayó y se fracturó la cadera, lo cual interrumpió el tratamiento por unos días.
No obstante, Gutiérrez informó que cuando se terminó el tratamiento y esperaron para evaluar su respuesta, se encontraron con que la «enfermedad se había ido al pulmón» del exmandatario.
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