Ciudad Guayana.- El pasado martes 12 de julio se llevó a cabo de manera virtual el foro Guayana sí es recuperable, en donde representantes de distintos sectores de la sociedad venezolana ofrecieron su punto de vista en torno a esta afirmación, pese a que el parque industria de  la ciudad hoy funciona con bajos índices de producción.

Jorge Roig, ex presidente de Fedecámaras nacional; Andrés Velásquez, dirigente político -y posible precandidato presidencial, y María Nuria de Cesaris, urbanista, detallaron lo que para ellos fue el causante de que Guayana dejara de ser la alternativa no petrolera de Venezuela, pero además relataron una serie de propuestas que estarían direccionadas a recuperar ese título de «emporio industrial» que perdió.

Cimientos de una alternativa

En los años 60′ el entonces presidente de Venezuela, Rómulo Betancourt, inició un proyecto que serviría como una alternativa para la economía rentista que arropaba al país: la creación de Ciudad Guayana.

Una zona que está ubicada en el sur-oriente del país, cuya extensión posee más de 7.000 toneladas de reserva de oro, cobre, hierro, diamante, coltán, bauxita y otros tantos minerales que aumentan el valor de la región.

Además, un imponente río que servía como puerto estratégico por su salida al océano atlántico. El Orinoco es el tercer río más caudaloso del mundo, esta característica facilitó la creación de ese imponente sistema eléctrico que en algún momento llegó a ser uno de los más grandes e importantes de América.

Las empresas básicas que se asentaron en la zona, volvieron a Guayana el emporio industrial de Venezuela. 

El inicio del fin

Según Jorge Roig, ex presidente de Fedecámaras nacional, el origen del problema nace en el modelo que estaba teniendo aquel proyecto.

«El modelo de desarrollo en Guayana dependía de dos cosas fundamentales: una alta inversión pública, que la hubo, y una buena gerencia, que la hubo. El problema es que cualquiera de esos dos factores que fallara, que de hecho fallaron ambos, empezaría a mostrar su peor cara», zanjó.

Para Roig es condenable el hecho de que aquel sistema anti rentista fuera muy dependiente de los ingresos que provenían del Estado. Después de que los precios del petróleo comenzaran a desplomarse, por la segunda década del siglo XXI, y los problemas gerenciales en todo el holding de la CVG comenzaron a ser protagonistas, Guayana comenzó a perder paulatinamente todo su poderío industrial.  

Según Andrés Velásquez, ex gobernador del estado Bolívar, la principal razón de la caída de producción de las empresas básicas tiene nombre y apellido: socialismo chavista.

«El régimen, cuando impuso su plan de Guayana socialista que nosotros calificamos como un plan de destrucción de Guayana, terminó siendo la mayor estafa que hayamos podido vivir. Hubo una destrucción deliberada de las empresas básicas», vociferó.

¿Se puede recuperar?

La urbanista María Nuria de Cesaris explicó que la ciudad está tan bien planificada, que existen muchas razones para pensar que sí es recuperable.

«Los proyectos de urbanismo fueron referencia en el mundo. Se crearon las universidades para proteger el material humano que se necesitaba para el futuro. Tenemos las empresas que se requieren. Por ejemplo, en este momento se está necesitando mucho aluminio por la alta demanda de bicicletas en las ciudades del mundo», expresó.

«Guayana no es el espacio vacío de los 60. Tiene las bases sólidas para poner sobre ella lo que se requiera»; manifestó.

Por otra parte, el ex presidente de Fedecámaras, Jorge Roig, aseveró que el primer punto a tratar debe ser el tema energético. Después de la crisis en materia de electricidad en Venezuela, en la que la administración de Maduro culpó a Estados Unidos, muchas empresas básicas dejaron de recibir la cuota de energía necesaria para prender los hornos.

«Primero hay que proteger lo existente. Antes no había nada. Guayana tiene, al parecer, la energía suficiente en estos momentos para suministrarle a algunas plantas de producción. No vamos a tener la misma Sidor que teníamos antes. Hay que racionalizar un poco, pero creo que todo pasa por el tema energético», manifestó.

Roig también puntualizó en el tema minero. Aseguró que con buena gerencia la región puede ser pionera gracias a las grandes cantidades del metal amarillo.

«Ya oficialmente se dice que hay 1.500 millones de dólares de oro que se reportan, pero es que también hay 2.000 millones de dólares en oro que no se reportan y se van por los caminos verdes. ¿Se imaginan todo lo que se puede hacer si se administra bien todo ese dinero?», se cuestionó el empresario.

Sin embargo, el dirigente político y líder del partido La Causa Radical, Andrés Velásquez, cuestionó que se puedan llevar a cabo todos los cambios y estrategias si antes no existe un cambio político.

«Todo lo relacionado a la recuperación económica de la región, necesariamente está ligado con el cambio político. El contexto en donde vamos a trabajar todos estos planes para mí es importante. Sin cambio político no habrá cambio económico y es muy difícil hablar de un cambio de modelo. Es indispensable retornar a un modelo democrático para poder hablar de construir, antes no», esgrimió.

Por último, Velásquez afirmó que la recuperación es muy posible de manera lenta pero paulatina, pero siempre y cuando el cambio de administración surja. «Guayana no es una isla. Hay que salir del contexto político en todo el país», concluyó.

 

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