Funcionarios de la Policía Civil de Roraima, ubicaron un cementerio clandestino con cinco cadáveres sepultados, el hallazgo se produjo entre los barrios de Pricumä y Cinturäo Verde, a pocos metros de un gran supermercado de Roraima, Brasil.
El descubrimiento aconteció luego de varias denuncias que recibió la Policía Militar, posteriormente los uniformados avisaron a la Comisaría General de Homicidios (DGH) para que hiciera las averiguaciones.
Expertos de homicidios, acompañados de la Fuerza Táctica del Batallón SHOCK y del Instituto de Criminalísticas, también del Instituto de Medicina Legal, se hicieron presentes en el sitio del hallazgo para iniciar las pesquisas.
Según, las investigaciones preliminares hacen suponer a expertos judiciales que dicho cementerio clandestino está relacionados a actividades criminales encabezadas por venezolanos.
Luis Fernando, uno de los jefes de la DGH desenterraron cinco cuerpos, entre las víctimas dos mujeres, y siguen buscando en el área para descartar que no existan más cuerpos sepultados en dicha área.
Al parecer, tienen cuatro individuos venezolanos detenidos como principales sospechosos de la mencionada masacre, o tal vez, ocultamientos de los cuerpos.
Las víctimas aún no han sido identificadas, se desconocen si se tratan de venezolanos o ciudadanos brasileros.
Tres víctimas fueron localizadas en una fosa y otras dos en otra, las cuales corresponden a dos mujeres, aparentemente con heridas de armas de fuego.
Investigadores colectaron como evidencias ropa, bolsas vacías de cal y otros objetos de interés criminalístico; además, se desconoce el tiempo transcurrido desde la muerte de estas personas.
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