Brasilia.- Las inversiones extranjeras directas en la economía brasileña alcanzaron los 1.838 millones de dólares en enero, lo que significa una caída del 30,7 % frente al mismo mes de 2020, informó este miércoles el Banco Central.
En los 12 meses acumulados hasta el 31 de enero, la inversión extranjera directa en el país suramericano era de 33.350 millones dólares, equivalentes al 2,32 % del producto interno bruto (PIB), mientras que en el interanual de diciembre representaba el 2,38 % de la economía.
Un año atrás, en enero de 2020 y antes de la pandemia por la covid-19, el acumulado de los últimos 12 meses había sido de 69.000 millones de dólares, correspondientes al 3,73 % del PIB.
La inversión de los extranjeros en proyectos productivos en Brasil viene cayendo drásticamente desde el inicio de la pandemia y en medio de la incertidumbre de sus aún desconocidos efectos en la mayor economía de Suramérica.
La retracción de la actividad económica global debido a la crisis sanitaria y económica provocada por la covid-19 ha ocasionado además una fuga de inversiones en los países emergentes, de acuerdo con analistas del mercado.
El emisor brasileño igualmente informó que el país cerró enero con un déficit de 7.253 millones de dólares en sus transacciones con el exterior, un 29,6 % inferior a los 10.305 millones de dólares negativos en el saldo del primer mes de 2020.
El saldo en transacciones corrientes es el principal referente del sector externo del país y está formado por la balanza comercial (comercio internacional de productos), los servicios y las rentas (remesas de intereses, lucro y dividendos de Brasil para el exterior).
Hasta el 31 de enero, Brasil registró un saldo negativo de sus transacciones corrientes en los últimos 12 meses de 9.405 millones de dólares, equivalentes al 0,65 % del PIB. En diciembre esa proporción interanual correspondía al 0,87 % de la economía.
El ente emisor calcula un déficit de las transacciones corrientes para este año de 19.000 millones de dólares, que equivalen al 1,2 % del PIB.
En 2020, un año marcado por la pandemia de la covid-19 y su impacto en la economía global, las inversiones extranjeras directas en Brasil sumaron 34.167 millones de dólares en 2020, una reducción de un 50,6 % frente a 2019 y que supone el menor nivel alcanzado en el país en 11 años.
El resultado quedó abajo de lo previsto por la autoridad monetaria, que esperaba unas inversiones extranjeras directas de 36.000 millones de dólares para 2020, según los cálculos revisados el pasado diciembre.
Para 2021, el Banco Central proyecta unas inversiones extranjeras directas por el valor de 60.000 millones de dólares.
EFE
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