Ciudad de México.-Los videojuegos permiten transportar a los usuarios a universos donde sale a relucir la imaginación de los desarrolladores, aunque en ocasiones el resultado termina por dividir opiniones, al punto de conseguir aparecer en la agenda de conversación de las personas ajenas a esta forma de entretenimiento, siendo que se convierten en objeto de las críticas por las polémicas mecánicas, si bien la lista es larga, hay algunas obras que acaparan los reflectores.

Doom

Este shooter fue revolucionario por diversas razones, pues si bien no fue el primero en implementar una visión en primera persona y en 3D (ese fue su antecesor, Wolfenstein), la segunda creación de John Carmack y John Romero, fue la que se catapultó a la fama, en gran parte por la cantidad de violencia que mostraba, los escenarios infernales llenos de demonios y personas sodomizadas, lo cual escandalizó a la población de la época, situación que sólo incrementó la popularidad del título.

Mortal Kombat

Los juegos de peleas ya era un género consolidado, en el momento se veía complicado el hecho de lograr un gran impacto y destronar a Street Fighters 2, hasta que llegó Mortal Kombat que mostraba a personajes con actores reales, además del derroche de sangre y los fatalities. Fue tal la polémica que se generó en torno a esta obra que de ahí nació el ESRB y la OFCL australiana, las cuales se encargan hasta la fecha de ponerle la clasificación a los videojuegos.

Call of Duty: Modern Warfare 2

Los shooters suelen ser el centro de las críticas, más cuando la temática es el uso de ejércitos de los países. En esta ocasión, CoD encendió las alarmas de los gobiernos no tanto por el juego en su totalidad, sino por una misión en particular, la cual se llama “Nada de ruso” que consistía en ingresar a un aeropuerto simplemente para realizar una masacre a civiles.

Carmageddon

El hecho de matar a civiles suele ser un punto que provoca irremediablemente la polémica, pues a finales de la década de los 90, surgió un título de carreras o eso es lo que parecía hasta que el usuario se daba cuenta que en realidad sólo se trataba de subirse a un auto para atropellar a los transeúntes. Tiempo después se sacó una versión censurada en la que se cambiaba a las personas por zombis, ¿el cambio? Sólo pintaron a los personajes de verde.

Hatred

Un juego del que se habló más por las críticas que por resultar una grata diversión, ya que el concepto es lo que sucedió con los pasados dos ejemplos, con la diferencia que aquí el protagonista se convertía en una fortaleza andante y comenzaba a disparar a todo lo que se le atravesaba, generar la mayor masacre posible antes de sucumbir ante el fuego de la policía.

Con información de mediotiempo.com

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