Manila.- El presidente de Filipinas, Ferdinand Marcos Jr., asume que, en caso de un conflicto bélico en Taiwán, sería «difícil que Filipinas no se viera involucrado de una manera u otra» debido a la «cercanía geográfica» entre ambos, mientras aumenta la tensión en torno a Taiwán, que Pekín no descarta invadir.
«Sentimos que estamos en la primera línea» si se desatara un conflicto en Taiwán, dijo Marcos Jr. en una entrevista a Nikkei antes de regresar de Japón el domingo, tras una visita oficial de cinco días.
La parte más septentrional de Filipinas, en la isla de Luzón, está separada del sur de Taiwán por los alrededor de 250 kilómetros que abarca el estrecho de Luzón.
Las declaraciones de Marcos Jr. llegan en un momento delicado para las relaciones entre China, que considera a Taiwán una isla rebelde y no descarta invadirla, y Filipinas, país que ha estrechado lazos con EE.UU., en medio de crecientes incursiones de cazas chinos en espacio aéreo taiwanés y otros actos intimidatorios de Pekín.
Así, el 2 de febrero, durante una visita a Manila del secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, China y EE.UU. acordaron aumentar un pacto de Defensa firmado en 2014, por el que tropas de EE.UU. podían operar en cinco bases militares filipinas, añadiendo cuatro más en zonas «estratégicas».
Los expertos apuntan a que las nuevas bases, aún por revelarse, podrían ubicarse precisamente en Luzón, para facilitar a EE.UU. el acceso a Taiwán -que en principio Washington defendería en caso de ataque de Pekín-, y Palawan, el área continental más próxima a unas islas del Mar de China Meridional que se disputan China y Filipinas.
«La temperatura en la región se ha elevado lentamente. Debemos pues ser más cuidadosos en asegurar que defendemos adecuadamente nuestra integridad territorial», afirmó Marcos Jr. en la entrevista al medio nipón.
VISITA ESTRATÉGICA A JAPÓN
El presidente filipino también admitió, en declaraciones a medios locales desde el avión de vuelta de Tokio, estar trabajando en un acuerdo de Defensa con Japón, aliado de EE.UU., para permitir ensayos militares entre Tokio y Manila.
Además, Marcos Jr. agradeció durante su visita a Japón la ayuda de Tokio en materia de equipamiento militar, que sirve para patrullar las aguas en disputa con Pekín en el mar de China Meridional.
Aunque desde que llegó al poder en junio Marcos Jr. ha reforzado sus lazos con Washington, tras el viraje hacia China del expresidente filipino, Rodrigo Duterte (2016-2022), trata igualmente de mantener la sintonía con Pekín, su mayor socio comercial.
A principios de año, el mandatario filipino se reunió en Pekín con su homólogo chino, Xi Jinping, con quien acordó una línea directa de comunicación para enfriar la disputa en el mar de China Meridional.
Pese a ello, las tensiones en este ámbito también parecen ir en aumento, y hoy los guardacostas filipinos acusaron a una patrulla costera china de escalar sus métodos de acoso empleando por primera vez un láser cegador contra uno de sus barcos en el mar de China.
¡Síguenos en nuestras redes sociales y descargar la app!