Lima.-Las autoridades sanitarias de Perú se preparan para afrontar los desastres provocados por fenómenos climáticos durante el verano con la implementación de un hospital de contingencia móvil, presentado cuando el país comienza a sufrir lluvias intensas, inundaciones, deslizamientos y aludes.
La instalación fue mostrada este lunes en el local del Instituto Nacional de Salud (INS), en Lima (Perú) y comprende, entre otros elementos, salas quirúrgicas y de hospitalización masiva.
«Los hospitales de contingencia móvil se podrán instalar en zonas sensibles y tienen capacidad de realizar más de 500 atenciones por día», destacó la ministra por la ministra de Salud, Elizabeth Hinostroza.
Con esta instalación se busca enfrentar los efectos de desastres que cada año causan grandes daños personales y materiales en Perú, sobre todo durante los meses de lluvias intensas, que se presentan de diciembre a marzo.
UN TRABAJO COORDINADO
Hinostroza indicó que el Ministerio de Salud (Minsa) prepara las acciones de contingencia «de manera articulada con los demás sectores», como los ministerios de Defensa y del Interior, con el objetivo «dar una respuesta en conjunto».
«Lo más valioso es el personal de salud que trabaja día a día en la atención de este tipo de emergencias», remarcó.
La ministra acotó que se está «desplegando una estrategia con hospitales de campaña para capacitar al personal de salud y así estén preparados ante un terremoto de gran magnitud o una gran inundación».
Durante la presentación también se dieron a conocer las acciones del plan de contingencia del Minsa y las actividades que se desarrollan en el Puesto de Comando Salud, donde se instala el Centro de Operaciones de Emergencia (COE Salud) y se reúnen las autoridades para la toma de decisiones.
LOS PRIMEROS DAÑOS EN EL PAÍS
El Centro de Operaciones de Emergencia Nacional (COEN) informó que diferentes localidades del país ya sufren los efectos de las lluvias, crecidas de ríos, deslizamientos y huaicos (aludes).
Entre los municipios afectados este fin de semana estuvieron los distritos de Santa Ana de Tusi y de Vilcabamba, en la región central de Pasco, que fueron afectados por un alud y un huaico, respectivamente.
En Santa Ana, las autoridades y pobladores locales hicieron trabajos de limpieza en viviendas y una carretera, y se entregó ayuda humanitaria a las familias afectadas, que se han trasladado a los domicilios de familiares y vecinos.
En Vilcabamba, un deslizamiento afectó el servicio de agua potable y una vía vecinal, por lo que se debió usar maquinaria pesada para su limpieza, mientras que también fue afectada una vía entre el distrito de Matacoto y las localidades de Quillo y Muque.
Además, la oficina del Instituto de Defensa Civil de la región amazónica de San Martín informó que coordina con el Gobierno Regional la entrega de ayuda humanitaria para las familias damnificadas por una erosión fluvial registrada el 19 de diciembre en el distrito de Shunte.
Según la evaluación de daños, esta emergencia dejó a cuatro familias damnificadas, con sus viviendas inhabitables, así como destruidos un tramo de carretera y tres puentes.
ALERTA DE LLUVIAS, NIEVE Y GRANIZO
El Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú (Senamhi) alertó, por su parte, que 125 provincias de 17 regiones del país serán afectadas desde el 24 al 27 de diciembre por la caída de lluvias, nieve y granizo, acompañadas por descargas eléctricas y fuertes vientos.
Los máximos acumulados de lluvia se presentarán en la sierra sur y el granizo caerá, de forma aislada, principalmente en localidades situadas por encima de los 3.000 metros sobre el nivel del mar, y la nieve sobre los 4.000 metros de altitud.
Las regiones con alerta por los fenómenos climáticos son las norteñas Áncash, Cajamarca, La Libertad, Lambayeque y Piura; las sureñas Apurímac, Arequipa, Ayacucho, Huancavelica, Cusco y Puno; las centrales Huánuco, Junín, Pasco y Lima; y las selváticas Amazonas y San Martín.
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