Ciudad Bolívar-. Érase una vez… Hablar de la transformación del deporte en todo el país, era referirse a centenares de infraestructuras construidas y recuperadas por la llamada Revolución Bolivariana. Un recinto deportivo que era un ícono importante de esta política del actual Gobierno nacional, era el complejo de piscinas olímpicas de Ciudad Bolívar, capital del estado Bolívar: recuperada después de casi tres décadas de abandono y desidia, mostró unas modernas instalaciones.

Luego de la refacción del recinto acuático, realizada por la antigua magistratura regional, se ejecutaron diferentes actividades para el aprovechamiento de los espacios. Este complejo totalmente recuperado, era una realidad palpable. Beneficiaba a deportistas y al pueblo en general que podía recrearse en estas instalaciones, esta obra como muchas otras era el impulso al deporte acuático en el estado.

Con una inversión millonaria se le cambió la cara a este complejo de piscinas que estuvo años en el olvido, con solo una pinturita en el exterior.

Las instalaciones cumplían con las normas para competencias nacionales e internacionales. Las placas, pizarras y tacos le daban un verdadero realce a este deporte, ya que les permitía a las y los atletas manejarse con mayor confiabilidad con el registro de los datos precisos por participación.

Más de 3 mil atletas bolivarenses y de cualquier parte del país disfrutaban de las instalaciones, así como toda la colectividad.

Ni sombra de lo que era

Lo que era una de las infraestructuras más completas y modernas de Venezuela, hoy día no es ni la sombra de lo que era hace cuatro años atrás, solo quedan recuerdos, fotos y momentos vividos en el complejo que fue estandarte deportiva de la antigua magistratura regional.

A principio del año 2020, el titular de la cartera de deportes, anunciaba por todos los medios un plan estratégico de recuperación del recinto deportivo. Enfatizaba Ivan Ponton, “El tema de las piscinas olímpicas será uno de los estandartes dentro de los que corresponde a la gestión 2020 en el ámbito deportivo, de nuestro gobernador Justo Noguera Pietri, que está empecinado, es un enamorado del proyecto y sabemos que se trata de un emblema del estado, y este año de seguro concretaremos cosas importantes en tal sentido…”

Hoy 04 de octubre de 2021 el equipo reporteril de Nueva Prensa de Guaya se trasladó al lugar y pudo constatar el abandono total de la obra a la que calificaron de “Estandarte de la gestión deportiva del 2020”.

El abandono total de este complejo deportivo ha sido motivo de molestia para deportistas, vecinos del sector, políticos del municipio y para la colectividad bolivarense.

¿Y cómo no causa molestia,  la prenombrada piscina? Pues la piscina olímpica ha sido parte de la vida contemporánea de la ciudad, fue un espacio para el esparcimiento y la socialización de niños y jóvenes, de todos los estratos sociales sin distinción, además fue el lugar de formación atlética y deportiva de alta competencia, era un espacio donde se forjaba el carácter a base de disciplina y trabajo diario.

José Belisario, antiguo profesor de la piscina olímpica, expresó que los vecinos del sector denuncian la indolencia gubernamental y exigen pronta respuesta a esta problemática que presenta la obra que en su momento “fue bandera de una política de altura”.

Comento que “esta situación lleva años, ya no queda nada, solo recuerdos (…) se han anunciado ya dos reparaciones, y solo vienen unos obreros, se han hecho unas inspecciones, se han retirado escombros y más nada, no hay acciones contundentes para resolver este problema”.

Belisario, sentenció que los atletas y Ciudad Bolívar necesitan esta obra, “ya que aquí había escuela de natación para los niños de toda la ciudad y ahora estamos en total abandono”.

Otro vecino, identificado como Ramón Figueroa, denunció que “queremos que la piscina se reactive, que esté operativa como la teníamos anteriormente de verdad que queremos justicia, queremos que nuestros hijos disfruten de su rato de esparcimiento y que eso funcione como lo teníamos antes”.

Espacios tristes y desolados

Por su parte, Emilio Torres, coordinador municipal de Primero Venezuela, destacó el efecto negativo que ha traído para la economía de la ciudad el abandono de la Piscina Olímpica, ya que las competencias que se llevaban a cabo en el complejo deportivo eran factor de impulso a la actividad hotelera y de servicios de la ciudad, específicamente restaurantes, hoteles, y comercios de la zona, generando un impacto positivo en la ciudadanía en general.

“Hoy es un escenario triste y desolador, todas las oficinas fueron derrumbadas y así quedaron, no existen baños ni puertas, las fosas están sucias, y llenas de agua estancada, que es un ambiente ideal para la proliferación de plagas y zancudos, convirtiéndose en foco de riesgo y trasmisión de enfermedades como el Zika o el Dengue, más ahora que vivimos azotados por el covid-19”.

Finalizó diciendo que “lo que sería un estandarte de la gestión deportiva del 2020 de Justo Noguera Pietri y del Instituto del Deporte, no ha pasado de ser un estandarte del retraso y las promesas incumplidas en materia de infraestructura deportiva en Ciudad Bolívar”.

EFE noticias

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