Caracas.- El Presidente de la Sociedad Venezolana de Puericultura y Pediatría, Huníades Urbina, advirtió que aunque la educación y la interacción social son esenciales para el desarrollo de los niños, no se puede regresar a las aulas sin tener condiciones seguras.
«No podemos regresar a la educación presencial en pleno ascenso de contagios. Lo ideal sería que el Estado se sentara a evaluar las cifras de forma realista – tomando en cuenta que los epidemiólogos advierten de un subregistro de 50 o 60% en Venezuela ante la baja cantidad de pruebas adecuadas – e incluyeran a las sociedades científicas que no hemos sido consultadas a pesar de mostrar nuestra disposición para trazar un plan», aseguró Urbina.
A su juicio, la flexibilización de una escolaridad presencial podría empezarse en algunas localidades – estados con menor población y menor número de contagiados – segmentando a la población estudiantil y disminuyendo su presencia a un 30%. «Los niños son los mayores transmisores del virus porque aunque la padecen menos expulsan el virus en mayor cantidad que los adultos. Y a eso se suma que los niños menores de 6 años no deben usar tapabocas en el colegio», advirtió.
Urbina llamó a esperar a septiembre y evaluar lo que esté ocurriendo en el momento para tomar una decisión, pero alertó que si para ese momento sigue aumentando el contagio no es seguro mandar a los niños a clase.
«Si como padre debes asumir el papel del maestro es importante entender la importancia de procurar la mejor salud mental, porque hay estudios recientes que alertan del aumento de la violencia intrafamiliar – sobre todo hacia los niños – por la cuarentena. Los padres se angustian y no saben manejar la situación. Cuando esto ocurra aíslese hasta que se calme y si está en sus posibilidades busque quien le ayude con la educación de sus hijos», recomendó el pediatra.
Es esencial un Plan curricular de Emergencia
El coordinador de Plan País Educación, José Manuel Bolívar, advirtió que al menos 85% de los niños en edad escolar dependen de un sistema público que está en colapso desde mucho antes de la pandemia y no está preparado para recibirlos en las aulas.
«Venezuela no ha desarrollado un programa curricular como en el resto del mundo, los maestros advirtieron que no regresarán a las aulas hasta que su trabajo sea valorado, no se cuenta con la conectividad mínima para implementar la educación a distancia y las escuelas no tienen agua ni jabón ni las condiciones mínimas sanitarias», alertó Bolívar.
Ante este panorama el planteamiento de Plan País Educación es elevar este Derecho Humano por encima de la política a un nivel humanitario. «Los niños no pueden esperar a que se solvente la crisis política; es fundamental impulsar acuerdos como el logrado con la OPS en materia de salud para salvar el año escolar, porque no es cierto que perder un año no es nada; en niños de 4 o 5 años un año de educación es irremplazable», explicó.
A su juicio es esencial desarrollar programas de emergencia de educación a distancia como se está haciendo en todo el mundo. «Debes simplificar el currículo y enfocarte en las áreas importantes: lectoescritura, matemáticas, salud y ciudadanía; que los maestros puedan cubrir la canasta básica – hoy en 270$ mientras ellos ganan 5$ – y tengan un seguro de salud. Es indispensable aumentar la conectividad en el país y en cuarto lugar recuperar la infraestructura de las escuelas».
Para Bolívar Uruguay es un gran ejemplo pues 90% de los niños asiste a escuelas públicas y han implementado un modelo escalonado al que acude 30% de la población estudiantil una o dos veces por semana; los niños se lavan las manos una vez por hora y los espacios de recreo también son escalonados y con distanciamiento.
A su juicio para que Venezuela pueda lograr esto es indispensable que la sociedad venezolana se movilice para exigir el cumplimiento de este Derecho Humano.
Agencias
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