La filipina Mary Jane Veloso, quien ha pasado casi 15 años en el corredor de la muerte en Indonesia acusada de narcotráfico y en 2015 se salvó de ser ejecutada en el último momento, regresa esta noche a su país gracias a un acuerdo bilateral para su repatriación.
Veloso, de 39 años, será trasladada en un vuelo de la aerolínea Cebu Pacific que tiene previsto despegar de Yakarta el miércoles a las 00:05 hora local (15:05 GMT del martes), y llegar a Manila en torno a las 5:40 hora filipina (19:40 GMT).
Durante el trayecto, de unas 4 horas y 35 minutos de vuelo, Veloso estará escoltada por funcionarios filipinos y a su llegada se espera que sea trasladada a un penal.
Esta repatriación se produce días después de que Indonesia, uno de los países con las leyes más duras contra las drogas, enviara a Australia a cinco australianos -miembros de un grupo bautizado como «los nueve de Bali»- tras pasar casi dos décadas en prisión también por delitos de narcotráfico.
Las autoridades indonesias alegaron razones humanitarias en ambos casos, que han contado con la intervención directa del presidente, Prabowo Subianto.
Veloso fue detenida en Indonesia en 2010 por transportar 2,6 kilos de heroína en su maleta, un delito por el que fue condenada a muerte ese mismo año, aunque la mujer siempre alegó que fue víctima de un engaño y que transportó las drogas a Indonesia sin su conocimiento.
Esperaba trabajar como empleada del hogar en el país vecino por intermediación de una compatriota, Maria Kristina Sergio, quien le dio una maleta con heroína oculta en su interior, según denunció Veloso en su momento.
Salvó su vida
La filipina debía ser fusilada en 2015 junto con otros ocho reos condenados por narcotráfico, pero salvó la vida en el último momento después de que la mujer que la contrató para transportar droga se entregara a la Policía en Filipinas citando haber recibido amenazas.
Entre los ejecutados en esa ocasión se encontraban dos miembros de «los nueve de Bali».
El pasado 20 de noviembre, el presidente filipino, Ferdinand Marcos Jr., anunció la repatriación de Veloso tras un acuerdo con el Gobierno de Yakarta y la intermediación de su homólogo indonesio.
Marcos describió a la filipina como una mujer «atrapada por la pobreza» y «víctima de sus circunstancias».
El Gobierno filipino señaló que Veloso, que no ha recibido el perdón en Indonesia, seguirá encarcelada en Filipinas, un país que no contempla la pena de muerte, aunque eventualmente consideraría otorgarle una medida de gracia.
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