Roma, Italia. En 1998 el brasileño Ronaldo Nazario conquistaba la Copa UEFA con el Inter de Milán y, con su gol al Lazio en la final, acabó su primer año interista con 34 dianas. Este viernes en la final de la Liga Europa contra el Sevilla, 22 años después, el belga Romelu Lukaku puede igualar o superar la marca del «Fenómeno».

Iván Zamorano, Javier Zanetti y Ronaldo fueron los goleadores de esa final del Parque de los Príncipes de París acabada 3-0 contra el Lazio. Fue la tercera Copa UEFA interista en una inolvidable década de 1990 y este viernes el Inter de Lukaku y el argentino Lautaro Martínez tiene la oportunidad de añadir la cuarta al palmarés del equipo milanés.

Sus ambiciones pasarán también por los pies de Lukaku, fichado el pasado verano procedente del Manchester United por más de 70 millones de euros para satisfacer las peticiones del técnico Antonio Conte, que ya había solicitado, sin suerte, su incorporación cuando dirigía al Chelsea.

El impacto de Lukaku en el Inter no pudo ser mejor. Hizo olvidar deportivamente al argentino Mauro Icardi, pasado al París Saint Germain, y anotó 33 goles entre todas las competiciones. Firmó 24 en la Serie A, dos en la Copa Italia y lleva seis en cinco partidos de Liga Europa.

Llega a la final de Colonia en su mejor momento. Arrolló con su poderío físico al Getafe, al Bayer Leverkusen y anotó un doblete este lunes ante el Shakhtar Donetsk para certificar el contundente 5-0 de su equipo.

Su fuerza física unida a la velocidad le convierte en un jugador en este momento casi incontenible. Lo vieron en los últimos días los defensas del Leverkusen, literalmente arrollados por el ímpetu del belga, y del Shakhtar, que nada pudieron hacer para evitar su doblete.

Además, la Liga Europa se le da particularmente bien a Lukaku. El belga lleva diez partidos consecutivos viendo puerta en el torneo continental y se hizo con el récord que pertenecía desde 2005 al inglés Alan Shearer, quien anotó en ocho encuentros seguidos con el Newcastle.

Marcó en cinco partidos consecutivos en la Liga Europa del curso 2014-2015, en una campaña europea acabada con nueve tantos en ocho encuentros disputados con el Everton, y retomó esa racha este año con el Inter. Marcó al Ludogorets en los dieciseisavos de final, en la ida y en la vuelta, al Getafe en los octavos, al Leverkusen en cuartos y al Shakhtar en las ya mencionadas semifinales.

Su gran temporada puede acabar con la guinda este viernes en Colonia, donde si marca al menos un gol igualará el registro de Ronaldo Nazario en su primera campaña con la camiseta «nerazzurra».

Ronaldo llegó a 34 con un golazo al Lazio, en el que regateó al meta Luca Marchegiani, y conquistó la Copa UEFA en París. Fue su mejor campaña interista, en una experiencia de cuatro años que acabó con 99 partidos y 59 dianas y que estuvo marcada por su grave lesión de cruzado.

El Fenómeno se quedó en los corazones de la afición interista, que tiene ahora a Lukaku como nuevo ídolo y líder ofensivo. Ahora, con características completamente distintas a las de Ronaldo, el belga puede poner su nombre en la historia del Inter.

EFE noticias

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