Según datos publicados por la Agencia de Información Energética de Estados Unidos (EIA), las reservas comerciales de petróleo en el país volvieron a disminuir. En la semana del 26 de julio, los inventarios cayeron en 3,4 millones de barriles, superando las expectativas de los analistas que esperaban una disminución de 1,10 millones de barriles.
Se trata de la quinta semana consecutiva de contracción en las existencias de petróleo, que ahora se sitúan en 433 millones de barriles, aproximadamente un 4% por debajo de la media de los últimos cinco años.
A pesar de esta caída en las reservas, la actividad en las refinerías estadounidenses se desaceleró. La semana pasada, las refinerías operaron al 90,1% de su capacidad, en comparación con el 91,6% de la semana anterior.
Además, las reservas de gasolina también disminuyeron, registrando una caída de 3,7 millones de barriles, lo cual superó las expectativas de los analistas que pronosticaban un descenso de 1,29 millones de barriles.
En cuanto a la producción de petróleo, se mantuvo estable en 13,3 millones de barriles por día, alcanzando un récord histórico.
A pesar de estos movimientos en las reservas y la producción, la demanda de productos refinados entregados al mercado estadounidense se redujo ligeramente a 20,7 millones de barriles por día, frente a los 21 millones de la semana pasada.
No obstante, en un promedio de cuatro semanas, la demanda aumentó un 1,4% en comparación con el año anterior, llegando a los 20,48 millones de barriles por día.
¡Síguenos en nuestras redes sociales y descargar la app!