Ciudad Guayana.- Luego de que el Tribunal 11 de Juicio del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) le otorgara la libertad a Rodney Álvarez, tras once años de detención sin pruebas en su contra, el trabajador se presentó a la CVG Ferrominera del Orinoco a solicitar el reenganche a su puesto de trabajo.
La empresa firmó la solicitud de Álvarez como recibida el 27 de junio y, además, se comprometió a suministrarle una respuesta el día lunes 4 de julio.
Rodney Álvarez declaró en entrevista exclusiva con Nueva Prensa de Guayana que espera encontrarse con noticias positivas, luego de haber pasado más de una década tras las rejas por un asesinato que no cometió.
«El día lunes me presenté a la empresa CVG Ferrominera del Orinoco, en horas de la tarde, a solicitar la reincorporación a mi puesto de trabajo. Fui encarcelado por un crimen que no cometí. Lo único que quiero es volver a trabajar», expresó Álvarez.
Además, aclaró que también entregó la sentencia absolutoria a las autoridades de la empresa estatal.
«Llevé la sentencia absolutoria en referencia a mi arresto ilegal y llevé la carta de solicitud de reincorporación a la empresa. Ellos la firmaron como recibida y me dijeron que fuera el lunes por la respuesta», manifestó.
Así como la solicitud de reenganche laboral, Álvarez aseveró que su lucha pasaba por la activación de los beneficios contractuales que dejó de percibir su familia.
«Quiero que se me pague el sueldo que dejé de recibir cuando me encarcelaron, como ya todos saben, de manera ilegal. Además, mi familia tiene derecho a recibir todos los beneficios que están establecidos en los contratos colectivos», zanjó.
Preso por un crimen que no cometió
En junio de 2011, durante una asamblea de trabajadores que tenía como fin elegir a los líderes sindicales de la empresa estatal, fue asesinado en los portones de Ferrominera el trabajador Ronny Rojas.
Para ese momento, los trabajadores que estaban en planta acusaron a Héctor Maicán, dirigente sindical y miembro del Partido Socialista Unido de Venezuela, como el responsable de apretar el gatillo que dejaría sin vida a Renny Rojas.
Héctor Maicán, el acusado de propiciar el homicidio, quedó en libertad bajo presentación cada 30 días. Álvarez fue apresado en Ciudad Piar, sin ningún tipo de prueba en su contra, y llevado a la cárcel Rodeo II. Allí pasó más de 10 años de su vida, alejado de su familia y siendo sometido a violaciones al debido proceso.
Hoy espera recobrar parte de su vida, luego de que el sistema que se encarga de impartir la justicia en Venezuela le haya arrebatado 11 años que se tradujeron en daños morales, de salud y materiales irreparables.
Brayan Silva
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