Rosmary Aguilera primero aprendió a cantar y luego a hablar, según su madre Rosmary Flores. Con solo 16 años, es una de las jóvenes más talentosas de la región y su voz es capaz de resaltar en medio de la multitud. 

La primera canción que se aprendió fue «Linda Barinas», todo gracias a su papá y a su tío, Manuel Flores, quienes son admiradores de la música llanera y se dedicaban a ello en sus tiempos libres. 

Dio sus primeros pasos a los 8 años, cuando sus padres la inscribieron en el programa de canto del Instituto Municipal de Cultura, ubicado en San Félix. 

Ha participado en alrededor de 10 festivales y exclama «Me ha ido muy bien en casi todos. Las personas me felicitan por mi voz».  

Una voz recia 

En sus andares por festivales, ha obtenido máximos galardones en los Merey de Guasipati, en los Monarcas de Oro, Tepuy de Oro en Santa Elena de Uairén, entre otros. Afirma que tiene deseo de continuar participando y de seguir con la formación que lleva hasta ahora. 

Su afán la ha llevado hasta la radio, se desempeña como locutora en el programa “Entre patronas”, en compañía de otras jóvenes que también sienten inclinación y amor por la música llanera. 

«Yo adoro la música llanera y me la paso cantando todo el día. Tengo una corneta en mi cuarto y es lo único que suena todo el día», confiesa Aguilera. 

Su madre, quien estaba al lado de ella durante la entrevista, dice «Todo lo hace cantando, no para de hacerlo y nosotros ya nos acostumbramos». 

Entre los artistas que la inspiran están Reina Lucero, Armando Martínez, Reinaldo Armas, Yenifer Mora, Miguelito Díaz y Rosangela Belisario. 

Un sueño 

Rosmary se define a sí misma como una persona disciplinada, apasionada y con grandes visiones. Su sueño es dedicarse a la música por completo y dejar el nombre del estado Bolívar en alto.

Además de estas características, es humilde, amable y carismática. Entre sus próximos proyectos está grabar algunas canciones compuestas por Rafael Sifontes, destacado profesor de música de Caroní, quien se encargó de formar a generaciones de artistas de música criolla del municipio. 

Sifontes era conocido por su aguinaldo «Concepción Divina», por problemas de salud abandonó su pasión de dar clases. Falleció el 25 de julio de 2022, se marchó dejando un legado en jóvenes y adultos. 

«El profesor Rafael era muy pegado conmigo y se dedicó a enseñarme. Se volvió una parte de mi familia y siempre lo mantendré en mi corazón», expresa Aguilera. 

A través de sus redes sociales, @aguilera.ross, se encarga de rendirle honor y mostrar sus presentaciones, además de sus temas favoritos. 

Rosmary perfecciona esa frase que una vez entonó Simón Díaz, «Los muchachos de mi pueblo todo el día andan silbando, ya por el mundo se dice: Venezuela habla cantando». 

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