Trabajadores de la empresa maderera Masisa lograron iniciar el proceso de elecciones sindicales, tras presuntas prácticas antisindicales por parte del patrono, y luego de llevar a cabo una serie de protestas frente al Palacio de Justicia, en Puerto Ordaz, por sus reinvindicaciones salariales.
«Nosotros los trabajadores de Masisa, en una actitud de constancia, de resistencia, hemos logrado abrir el proceso electoral para las elecciones sindicales correspondientes al sindicato de Citraema», declaró Jean Mendoza, trabajador de Masisa.
Masisa es una empresa trasnacional chilena productora y comercializadora de madera, ubicada al norte del río Orinoco, cuyo personal es 90 % del estado Bolívar, procedentes de San Félix, Puerto Ordaz, parte de Upata y Ciudad Bolívar.
Según explicó Mendoza, el sindicato de la empresa está vencido desde 2019 y desde entonces han mantenido una lucha constante para llevar a cabo el proceso de renovación.
«Nosotros tenemos un sindicato vencido desde el año 2019, y tuvimos primeramente una lucha contra esa burocracia, que era correr de transmisión a la política de la patronal, y por supuesto que la patronal, el sector privado, se alía perfectamente con las políticas anti obreras que se nos vienen aplicando desde el gobierno», aclaró.
Mendoza representa la plancha ocho en este proceso electoral, en ese sentido, hace un llamado a la participación de toda la masa laboral.
«A todos los trabajadores, hemos superado a la burocracia sindical, hemos superado quizás el retraso procesal de las instituciones, hemos superado todo lo que representan las prácticas antisindicales que gestiona la patronal privada Masisa. Ya estamos en proceso de hacer el acto electoral», afirmó.
Reivindicaciones salariales
El pasado jueves 27 de julio, trabajadores de Masisa se concentraron frente a los tribunales de Puerto Ordaz, para exigir celeridad en el caso relacionado con su contrato colectivo.
Como consecuencia del incumplimiento han recibido aumentos salariales discrecionales y sus ingresos son precarios en comparación con la canasta básica.
«Nosotros introducimos un reclamo en el 2020 por el incumplimiento a la política salarial establecida en ese acta, debido a que, como fueron suspendidos, no se publicaba el Índice Nacional de Precios Consumidos, no sabíamos cuánto era la inflación, para hacer el cálculo de nuestro salario, la empresa decidió firmar un acta para hacer los aumentos según los anuncios presidenciales», detalló Mendoza.
Es por ello que aseguran estar en un «limbo» luego del memorándum 2792, recibiendo aumentos salariales de manera discrecional por el patrón de la empresa.
«Desde el 2018 para acá, ni con la convención colectiva, ni con el acta firmada en el 2018. ¿Qué significa eso? Bueno, nos ha llevado a salarios precarios, a salarios cero comparados con la canasta básica», denunció.
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