Un título universitario es más que un papel; es el reflejo de años de esfuerzo, la coronación de sueños y un motivo de inmenso orgullo para estudiantes, familias, profesores y para toda la sociedad.
La Universidad de Oriente (UDO) abrió sus puertas para despedir y celebrar a 195 nuevos médicos venezolanos, una generación que se alza como promesa de sanación y esperanza.
De este nutrido grupo, 42 jóvenes profesionales recibieron menciones especiales por su excelencia académica, un testimonio de su dedicación y compromiso inquebrantable.
Durante 09 intensos años, los ahora médicos, dedicaron su vida a prepararse no solo en lo académico, sino también como seres humanos que tienen en sus manos la invaluable responsabilidad de brindar asistencia y alivio a quienes buscan sanación.
Una Celebración
La estola blanca, resplandeciente en el pecho de los recién graduados, robaba miradas de admiración en un lugar público de Anzoátegui.
Saber que para portarla habían superado sacrificios, demostrado entrega y un compromiso sin igual, hizo que todos en el lugar conectaran con una profunda emoción y un palpable orgullo colectivo.
Excelencia Académica
La Promoción 102 brilló con nombres ejemplo de perseverancia: El máximo promedio de la promoción fue para María Laura Moya, egresada del colegio Laura Vicuña de Puerto La Cruz.
Ekaterina Atay Romero @ekaterinatay del Núñez Ponte de Anaco (2016), alcanzó la mención Magna Cum Laude con un impresionante promedio de 8.87 durante toda su carrera.
El ahora Doctor Daniel Marchán Zacarías @damz2210 llevó con orgullo la estola blanca de Cum Laude, por obtener un promedio de 8.52. @natalyespinozay sumó 8.03. @noticiasdeanzoategui
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