Nueva York, Estados Unidos. El poder económico de los Yanquis de Nueva York volvió a quedar de manifiesto cuando la pasada noche, en la segunda jornada de las reuniones invernales, se confirmó que llegaron a un acuerdo para firmar un contrato de nueve temporadas y 324 millones de dólares con el abridor Gerrit Cole.
Lo que no se imaginaban era que fuesen a ofrecer tanto dinero y estableciesen un nuevo récord en el fichaje de un lanzador, un día después que los Nacionales de Washingtont, actuales campeones de la Serie Mundial, también le habían cerrado la continuidad de su abridor derecho Stephen Strasburg al darle un contrato por siete temporadas y 245 millones de dólares.
El ganador del premio de Jugador Más Valioso (MVP) de la pasada Serie Mundial ostentó durante un día el contrato mayor de la historia de las Grandes Ligas al recibir un promedio de 35 millones de dólares por temporada.
Ahora será Cole, quien tendrá ese honor y privilegio con un salario promedio de 36 millones de dólares, que supera a Strasburg, quien había batido a su vez el contrato firmado por David Price de 217 millones de dólares y el promedio anual de 34,4 millones de dólares que recibe Zack Greinke.
Cole, excompañero de Greinke con los Astros de Houston, la pasada temporada, fue dominante durante la temporada regular y la postemporada, ya que los Astros lideraron las Grandes Ligas con 111 triunfos.
El lanzador derecho, que también quedó segundo en la votación por el premio de Cy Young de la Liga Americana, que al final lo ganó otro excompañero, Justin Verlander, se convirtió en el deseo «prohibido» de la mayoría de los equipos de las Grandes Ligas cuando entró al mercado de los agentes libres, incluido el de Houston.
Cole, de 29 años estableció un récord para los Astros al ganar sus últimas 16 decisiones de temporada regular y encabezó a la Liga Americana con una efectividad de 2.50, la mejor de su carrera.
Sus 326 ponches, que fueron los más altos en su carrera, fueron la mejor marca en las mayores y establecieron un récord de franquicia de los Astros que se había mantenido desde 1979, cuando J.R. Richard retiró a 313 bateadores rivales por la vía del ponche.
Cole solo tuvo una derrota desde el 22 de mayo y fue en el Juego 1 de la Serie Mundial contra los Nacionales, pero se redimió con una salida estelar en el Juego 5.
Sin embargo, esa derrota iba a pesar como una losa en el juego de equipo de los Astros, que al final perdieron la serie cuando tuvieron 3-2 a su favor y los dos últimos partidos en su campo, que al final también perdieron y se quedaron sin lo que hubiese sido su segundo título del «Clásico de Otoño».
Durante la postemporada, Cole tuvo marca de 4-1 con efectividad de 1.72 en 36 2/3 entradas de trabajo en el montículo y nada más concluir la Serie Mundial se despidió de los aficionados de los Astros por todo el apoyo que le habían brindado desde que llegó al equipo.
Después de cinco temporadas con los Piratas de Pittsburgh, Cole fue cambiado a los Astros en enero de 2018 como parte de un acuerdo de cinco jugadores.
En sus dos temporadas con los Astros, mejoró en todo su repertorio de lanzamientos, especialmente la bola rápida que fue más poderosa, además de una mecánica más perfeccionada que le permitió colocar menos lanzamientos fuera de la zona de strike.
Esa evolución le permitió a Cole conseguir marca de 35-10 con una efectividad de 2.68, 602 ponches y tuvo un WAR de 12.1 mientras estuvo con los Astros.
Los valores de lanzamiento de FanGraphs tenían la bola rápida de Cole como la más valiosa en las Mayores la temporada pasada, y su slider también estaba en el top 10.
Sin embargo, a pesar del talento natural de Cole, el piloto de los Astros, A.J. Hinch, siempre defendió y especialmente durante la competición de los playoffs, que la gran virtud del lanzador estrella era su fortaleza mental.
«Siempre que sale al montículo está convencido que puedo hacer bien las cosas y tener el control de los lanzamientos que realiza, sin importar el rival al que se enfrente», destacó Hinch.
Cole, la selección general número 1 en el sorteo aficionado del 2011, tuvo marca de 12-12 con efectividad de 4.26 y 196 ponches para los Pirates en 2017, y fue enviado a Houston esa temporada baja a cambio de los lanzadores Joe Musgrove y Michael Feliz, el tercera base Colin Moran y el jardinero Jason Martin.
Como lanzador de los Piratas había terminado cuarto en la votación del Premio Cy Young de la Liga Nacional en el 2015 y ganó la primera de sus tres selecciones de All-Star esa temporada, pero fue menos efectivo en sus otras cuatro temporadas en Pittsburgh, de ahí que al final decidiesen intercambiarlo por joven promesas.
Cole también terminó quinto en la votación del Cy Young en el 2018.
Durante sus siete temporadas en las Grandes Ligas, Cole ha establecido una marca ganadora de 94-52 con efectividad de 3.22 y 1.336 ponches en 1.195 entradas.
Lo anterior le ha permitido que su proporción de 10,062 ponches por nueve entradas ocupa el sexto lugar entre los jugadores activos. y octavo en la lista de todos los tiempos de las mayores.
EFE
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