Ciudad Guayana. Tan dulce fue transitar por ese sueño que ni despierto hubiera sido capaz de imaginarse, como amargo ha sido el adiós. El Leicester despidió tal día como hoy de 2017, al mejor entrenador de su historia, Claudio Ranieri.
Habían pasado solo nueve meses desde que el técnico italiano guiara al humilde conjunto inglés a la conquista de su primer título de la Premier League y la disputa de la Champions League.
Ranieri hizo historia. Y dio lecciones sin quererlo. A sus jugadores, que solo unos meses antes tonteaban con el descenso, y a quienes empezaron a admirar sus gestas, pero todo lo bueno se acaba. El club lo despidió por la mala trayectoria del equipo en el campeonato doméstico en ese año, en el que era decimoséptimo, con 21 puntos, a uno del descenso.
“Claudio Ranieri escribió la historia más bonita de la Premier». Así homenajeo José Mourinho al técnico italiano que fue galardonado como Mejor Entrenador de 2016.
Los milagros de Ranieri en el Leicester:
- De luchar por la permanencia a ganar la Premier
«¿Ranieri? ¿De verdad?», tuiteó Gary Lineker tras el fichaje del ex del Valencia por el Leicester. A sus 64 años y tras una mala experiencia en Grecia, el técnico italiano convirtió a un equipo que había salvado con una remontada agónica la categoría en la campaña anterior y plagado de futbolistas desconocidos. «Somos como Forrest Gump, no podemos dejar de correr», afirmó Claudio.
El Leicester fue campeón con dos jornadas de margen y con 10 puntos de ventaja sobre el segundo posicionado. Su mejor clasificación en la historia de la Premier era el octavo puesto y los 55 puntos logrados en la 1999-2000. Pulverizaron todas sus marcas. Toda una gesta.
- El mejor visitante de la Premier
El Leicester era un peligro a domicilio. Fuera de casa, los ‘foxes’ lograron 39 puntos claves para llevarse el título. Ganaron en el Etihad (1-3), en White Hart Lane (0-1), empataron en Old Trafford (1-1) y sumaron 11 triunfos claves para el título
- Un muro defensivo… «motivado con pizza»
«Si dejan la portería a cero les invito a pizza». Así motivó Ranieri a sus futbolistas cuando el Leicester encajaba goles al principio del curso. Schmeichel, Simpson, Morgan, Huth y Fuchs se convirtieron en un muro sin concesiones. Echaron el candado 15 veces a su portería y fueron el tercer conjunto menos goleado (36 tantos en contra).
- Vardy: del fútbol amateur… a batir récords en la Premier
En 2012, Jamie Vardy jugaba en Quinta división. Después de llevar una tobillera electrónica, de tener toque de queda tras una pelea en un bar, de compaginar el fútbol con su trabajo en una fábrica de prótesis, el delantero inglés llegó al Leicester en Segunda y explotó en la Premier en el año en el que los ‘foxes’ fueron campeones. 24 goles y 11 jornadas seguidas marcando (récord histórico del torneo) para un Vardy que fue octavo en el Balón de Oro de ese año.
- Riyad Mahrez, de Segunda a ser el Mejor de la Premier
Después de llegar al Leicester en Segunda del Le Havre francés, el extremo africano, con tanta calidad como irregularidad en sus botas, se salió en los ‘foxes’. 17 goles y 12 asistencias, con exhibiciones ante el Tottenham o el City que le valieron ser nombrado el Mejor Jugador de esa Premier y el séptimo puesto en el Balón de Oro.
- Kanté: el mejor recuperador de Europa
«Kanté vale por dos», repetía una y otra vez Ranieri. El medio francés aterrizó en Leicester tras doctorarse en el Caen de la Ligue 1 y se convirtió en el mejor recuperador de Europa. Nadie cortó más balones que él (156). Con Drinkwater formó una sala de máquinas infranqueable. Con tres pulmones y cinco piernas sostenía a todos los ‘foxes’.
Redacción SNPD con información de Marca.com
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