Ciudad Guayana.-Cuando Dubramely Girl cruzó la llegada en las manos de Emisael Jaramillo el hipismo venezolano celebró. Esa victoria en aquellos 1200 metros el 31 de mayo del 2014 fue la tres mil para un jinete que nació para hacer historia.
La yegua partió por el puesto uno y salió en punta. Dejó parcial de 0:23.01 para los 400 metros ante una Mi Candela que la atacó por la parte exterior. En la recta final, Dubramely Girl se despegó haciendo inútil la atropellada de Oriana Mercedes. En 1:13.00, el nativo de Tucupido en el estado Guárico ya había conseguido una gran marca.
Y es que desde aquella victoria con el caballo Lancelot, entrenado por Kiko D’Angelo, no ha dejado de ganar. A los 43 años, Emisael Jaramillo está más que vigente sumando 14 estadísticas en La Rinconada, dos menos que Juan Vicente Tovar, tres mil victorias en Venezuela y mil en Estados Unidos.
Tres mil victorias es una cifra redonda a la que no pudieron llegar Juan Vicente Tovar, Douglas Valiente, Ángel Alciro Castillo, entre otras leyendas. Sus tardes de monta aún emocionan a los amantes del hipismo, sobre todo sus actuaciones en clásicos internacionales sobre caballos venezolanos.
Jaramillo llevó a Front Stage en el 2000 a ganar la Triple Corona. La hija de Slew Prince en Backstage fue montada por el guariqueño, en sustitución de Rigo Sarmiento. También se dio el lujo de llevar al gran campeón My Own Business en sus grandes victorias.
Una de ellas, el Clásico Internacional del Caribe en el 2000, en el hipódromo de Canóvanas, Puerto Rico. Para Jaramillo esta sería uno de los cinco clásicos que ganó, tres de forma consecutiva, montando a ejemplares venezolanos.
Las jornadas caribeñas se convirtieron es sus favoritas. Comenzó la gesta en Puerto Rico con My Own Business en el 2000, la siguió con el triplete sobre Water Jet (Caracas 2010), Heisenberg (Panamá 2011) y El De Chiné (Puerto Rico 2012); su última victoria fue con Ninfa del Cielo en La Rinconada, 2014.
Precisamente en esa jornada caribeña del 2000, Jaramillo hizo “caída y mesa limpia”. No solo ganó la carrera estelar con My Own Business sino que también se llevó la victoria con High Security en el Confraternidad.
El clásico para caballos maduros también fue una obsesión para la leyenda venezolana. Esa imperdible yunta con My Own Business se repitió en 2002 para ganar la carrera para ejemplares mayores de cuatro años en Puerto Rico.
Gran Estefanía también contó con una gran monta de Jaramillo para ganarse a los machos en la edición del 2007 en Canóvanas. El de Tucupido nuevamente hizo de la suyas.
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