Los olores nauseabundos que producen las aguas fecales que corren por un tramo de la avenida principal del sector Francisco Avendaño, no solo es una situación desagradable para los que viven este lugar, también puede tener implicaciones para la salud pública, dicen lugareños.
Denuncian que son más de tres años que se desbordó la boca de visita. Las aguas fecales caen en otra cloaca, adyacente a la calle 2, a pocos metros de los edificios 9 y 10, después culmina su recorrido en la cárcava.
Uno de los afectados expresó que miembros del consejo comunal callan y no reclaman porque “les conviene, no pueden denunciar nada que perjudique la gestión del alcalde Tito Oviedo y del gobernador Ángel Marcano”.
Las últimas lluvias que acontecieron en la ciudad, se hizo una inmensa laguna en la calle por el muro de contención de tierra y escombros que echaron hace más de un año trabajadores de la empresa que tiene la obra de la cárcava de Los Alacranes.
Embaulado de la cárcava se detuvo
Denuncian que el embaulado de la zanja de grandes dimensiones fue paralizado hace más de un año y parte de la obra se perdió.
Los tubos de plásticos se partieron; mientras que los de concretos de 19 pulgadas se desajutaron por el caudal de agua que baja por la calle 2 y luego cae en la cárcava.
Al parecer, la obra se estancó por falta de recursos, en tanto que el deslizamiento de tierra no se detiene, y el hueco se va ensanchando, también acercándose a las viviendas.
Residentes afirman que ninguna autoridad del gobierno regional da explicación a las personas que se encuentran en peligro, “todo el material de construcción que había en las adyacencias de la cárcava cayeron al fondo del hueco y lo poco que se ha avanzado se va perdiendo”, apuntó uno de los perjudicados.
Piden al gobernador del estado Bolívar que explique a vecinos de Francisco Avendaño la razón por la cual detuvieron los trabajos de construcción.
Colinas de Pinto Salinas
Al otro extremo de la cárcava de Los Alacranes, avanza sin detenerse otro tramo de la mencionada fosa pero en la comunidad Pinto Salinas, ya 14 familias fueron reubicadas por autoridades del ejecutivo regional.
Carmen Lara dijo que la situación en este sitio era crítica para otros ciudadanos próximo al inmenso barranco cuya abertura se prolonga hasta la avenida Libertador y baja por el barrio 5 de Julio para luego caer en barrio El Centro, detrás de la Clínica humana.
“Persisten los riesgos, si continúan las lluvias, los deslizamientos van a seguir y la zanja crecerá, igual pondrá en riesgo a otras familias, tanto en Los Alacranes como en Colinas de Pinto Salinas”.
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