Una serie de irregularidades se siguen suscitando en la población de El Callao y sus alrededores, donde camiones cargados de material aurífero no cuentan con las lonas respectivas para evitar la caída de material, además de la generación de polvo por doquier.
«Cuando llueve en la troncal podemos ver los peñascos de material que quedan a mitad de vía, si ellos utilizaran sus lonas eso no sucedería», relató William Gómez quien también se quejó de la «polvareda» que se genera a lo largo de la troncal 10, especialmente en el tramo El Callao – Guasipati.
Y es que, a pesar de una serie de decretos municipales y presuntos controles, también es parte de la ‘normalidad’ que varios camiones se desplacen a ciertas horas por angostas calles, generando una nueva cantidad de huecos y sumado a la falta de lonas, también la presencia de polvo en el ambiente.
«Aquí no hay ley», sentenció Luis Hernández, quien también recordó que existe un corredor vial que es muy poco usado por las contratistas que hacen el acarreo de material aurífero desde las minas a los molinos donde finalmente son procesados.
Desde la municipalidad callaoense se pudo conocer que a pesar de ejecutar las herramientas legales, se hace engorroso poder aplicarlas a cabalidad, debido a una serie de factores que no fueron especificados.
El último episodio donde se registró la presencia de arena aurífera en la troncal 10 fue el pasado lunes 24 de julio cuando en horas de la noche se reportó la presencia de peñascos2 de la mencionada arena frente a la conocida plaza «El tambor», lo cual generó la alerta ante cualquier accidente que pudiera ocasionar por la irregularidad.
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