Cápsulas de paz

Romanos 8:1-4 RVA2015
[1] Ahora pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, [2] porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte. [3] Porque Dios hizo lo que era imposible para la ley, por cuanto ella era débil por la carne: Habiendo enviado a su propio Hijo en semejanza de carne de pecado y a causa del pecado, condenó al pecado en la carne [4] para qué la justa exigencia de la ley fuese cumplida en nosotros que no andamos conforme a la carne sino conforme al Espíritu.

https://bible.com/bible/1782/rom.8.1-4.RVA2015

Los hijitos amados de Dios, en los méritos de Cristo, hemos sido librados del poder del pecado y de la muerte eterna, por tanto, no tenemos ninguna condenación que nos afecte.

La ley del Espíritu, es decir la muerte y la resurrección de Cristo, derrotó al pecado, y nos libró de sus garras, trayéndonos paz con Dios.

Cuando Dios envió a su Hijo al mundo, Él hizo lo que era imposible para la ley, dar salvación a todos los que reconocen su condición de pecado, piden perdón a Dios, y aceptan a Cristo como Señor y Salvador de sus vidas.

Cuando somos hechos hijos de Dios, a través de Jesucristo, cumplimos la ley, al andar en el Espíritu y no en la carne.

Alabado sea Jesucristo, el Dios eterno, pues en Él tenemos salvación y vida en abundancia. En Cristo estamos ustedes completos, quien es la cabeza de todo principado y autoridad.

Pr. José N. Corrales
[email protected]
@pastorcorrales

¡Síguenos en nuestras redes sociales y descargar la app!

Facebook X Instagram WhatsApp Telegram Google Play Store