El problema de agua potable en el casco central de Upata, aún no se ha solucionado a pesar que los comerciantes y habitantes han hecho los llamados a Hidrobolívar.
Las respuestas o soluciones a este problema no han sido dadas como se ha requerido, inconveniente que viene afectado a los comerciantes, porque deben cancelar dos veces por semana una cantidad de plata en divisas por la compra del citado beneficio.
Para el comerciante Douglas Ferrer, la facturación del agua ha sido muy alta, “no entiendo porque debo cancelar por el servicio de agua, cuando en realidad llevo más de cinco años sin recibir el líquido por los grifos de las tuberías en mi negocio», destacó.
Afirma que ha sido todo lo contrario, «tengo que pagar 50 dólares por un tanque de mil litros, el problema que viene viviendo el casco central que se abastece del embalse Cupapuy ha sido muy difícil”.
Por su parte Mirla Rincón, otra de las afectadas señaló que cancelar una factura por un servicio que no cuentan es un exabrupto.
“Es la falta de conciencia por parte de la hidrológica, somos muchos los que padecemos las consecuencias al no contar con el agua, debemos estar cargando el líquido de otras partes y así evito comprarla a los camiones privados”.
Afectados claman atención
Al mismo tiempo, Juan Méndez, otro de los comerciantes explicó que son pocas las ventas en su local y debe estar reuniendo para poder pagar el recibo a final de mes.
“Son 120 dólares que debo cancelar a la semana, lo que no entiendo es porque la alcaldía no apoyo al gremio empresarial que está pasando por esta situación terrible desde hace mucho tiempo”.
Mientras que Luisa Gómez y Clara Martínez, habitantes en el centro de Upata, expresaron que sólo dos veces a la semana llega el beneficio por las tuberías de sus hogares, pero, en la madrugada, por lo que deben velar a que empiece a salir por los grifos y tratar de almacenar lo que puedan.
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