Una Ceiba longeva se convierte en una amenaza en la avenida Monseñor Zabaleta de Puerto Ordaz, parroquia Cachamay, entre Villa Colombia y urbanización Mendoza.
El árbol frondoso tiene una inmensa abertura por un costado, en donde comienzan las raíces.
Las aguas de lluvias que bajan por la calle Bucaramanga; luego se unen con las de la vereda Zipaquirá han ido golpeando el tronco y debilitándolo.
Al parecer, la cavidad del árbol producto de la cascada que se produce con el caudal de agua que cae por el barranco y después a un extremo de la avenida Monseñor Zabaleta, ya comió una parte de la mata.
Pulmón vegetal: una amenaza
Una de las inmensas ramas se partió recientemente quitándole un poco de peso al árbol, pero no deja de ser un peligro para los transeúntes y personas que circulan en sus vehículos por esta zona.
Los daños físicos de la Ceiba a consecuencias del agua, sequías prolongadas, exceso de humedad y cambios drásticos en el clima, han contribuido a empeorar la salud del árbol y de ser un pulmón vegetal, ahora pasa a ser una amenaza para los mortales.
¡Síguenos en nuestras redes sociales y descargar la app!