El bolso de Ranger Suárez estaba en el vestuario de los Filis el viernes, en el BayCare Ballpark. No se suponía que estuviera ahí.
Suárez tenía pautado estar con Venezuela, preparándose para lanzar en el World Baseball Classic. Sin embargo, regresó a los campamentos de los Filis luego de sentir rigidez en su antebrazo izquierdo, tras la exhibición que tuvo su país el miércoles ante los Astros. Suárez y los Filis no creen que se trate de algo serio, pero descansará algunos días, antes de reanudar su programa de pitcheo.
“Todo está bien”, expresó el monticular. “No están preocupados al respecto. Sólo querían que me revisara”.
Suárez dijo que aún espera poder estar en la rotación de los Filis para cuando le llegue su primer turno de abrir en la temporada regular.
“Yo creo, al menos es lo que estoy esperando”, dijo. “Sé que es una temporada larga, así que no quiero perderme mucho”.
El venezolano dijo que no se sometió a una resonancia magnética, porque “realmente no es la gran cosa”.
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