Después de dos años de restricciones, consecuencia de la pandemia por Covid-19, el jueves, 1 de septiembre, comenzaron las celebraciones en honor a la Patrona del oriente, con una de las tradiciones religiosas más importantes del país: la «Bajada de la Virgen del Valle», reportó Unión Radio.
Las fiestas se enmarcarán en los 70 años de patronazgo nacional de la Virgen del Valle, por lo que la Diócesis de Margarita estima la asistencia de unos 5.000 feligreses.
Gustavo Blanco Sáenz, vicealmirante jefe de la Zona de Defensa Integral (ZODI) del estado Nueva Esparta, manifestó a El Diario que, para mantener el resguardo de todos los asistentes, se contarán con alrededor de 300 efectivos de seguridad y desplegarán funcionarios en el resto de la isla.
Agenda
El párroco de El Valle del Espíritu Santo, Luis Eloy Serrano, invitó más temprano a los feligreses a acompañar a la virgen que, como es costumbre, será traída desde la cúpula de la iglesia para ser entronizada y compartió la agenda completa para la celebración:
- 7:30 a.m.: Santa Misa
- A partir de las 12:00 p.m. se cerrará la Basílica para el arreglo de la santa imagen
- 6:00 p.m.: rezo del Santo Rosario y comienzo del ejercicio del mes de la Virgen del Valle
- Finalizada la Santa Misa, se procederá al acto de la Bajada y Entronización de la imagen de Nuestra Señora del Valle del Espíritu Santo
Serrano agregó que podrán registrarse a través del sitio web quienes deseen reservar asientos: https://registro.basilicadelvalle.com/.
La «Patrona de los pescadores»
La Virgen del Valle es venerada por los pescadores del oriente de Venezuela cada 8 de septiembre, fecha en que el Obispo Antonio María Durán (Diócesis de Santo Tomás de Guayana) efectuó su Coronación.
Sin embargo, fue el 15 de agosto de 1910 cuando Pío X le concedió la Coronación canónica, según Decreto de la Sagrada Congregación Romana.
De acuerdo a la liturgia regional, uno de sus milagros más notables involucró a un pescador, quien tras perder su pierna ofreció regalarle la primera perla que encontrara en el mar a cambio de su curación.
El pescador logró pescar una gran perla en forma de pie, con la marca de una herida, la cual fue, de manera posterior, donada a un museo ubicado al lado de la Basílica Menor de Nuestra Señora del Valle.
Desde entonces, en Margarita, estado Nueva Esparta, se constituyó como costumbre que los pescadores salgan, durante el día de su Patrona, a recibir la bendición del mar en sus lanchas.
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