Momentos en que "José" se entrega a la justicia, en presencia del fiscal de los Derechos Fundamentales. Foto: Níger

Un hombre de aproximadamente 65 años de edad, mató a una mujer de 63 años de edad con un machete y otra resultó gravemente herida, el suceso ocurrió en la calle Puerto La Cruz de la urbanización Orinoco, parroquia Cachamay, Puerto Ordaz.

Al parecer, a eso de las 10:00 de la mañana de este jueves, hubo una discusión previa entre las víctimas que no llegó a trascender.

Cada una de estas personas alquilaban una habitación en la casa número 12, aparentemente, las relaciones entre vecinos estaban fracturadas por situaciones de violencia doméstica.

En horas del mediodía, lugareños oyeron gritos de auxilios que salían de este sitio, cuando algunos quisieron ingresar no pudieron, ya “José” había masacrado a machetazos al par de mujeres.

Huyó y regresó

Vecinos y familiares pudieron sacar a María Caña y a Tibisay, ambas con múltiples heridas en diferentes partes del cuerpo.

La primera ingresó a la emergencia del Hospital Dr. Américo Babó de la Ferrominera Orinoco, pero llegó sin signos vitales, en tanto que la segunda se debate entre la vida y la muerte en el Hospital Uyapar.

Tibisay, sufrió lesiones graves en las piernas, brazos, rostro y perdió algunos dedos de las manos, galenos de guardia la ingresaron enseguida al quirófano para intervenirla quirúrgicamente, su estado es de pronóstico reservado.

 

Fiscal de los Derechos Fundamentales

El homicida se encerró en la vivienda y amenazaba a los funcionarios de los cuerpos policiales que acudieron al sitio, con el arma blanca cuando intentaban pasar a la vivienda.

Jesús Rojas, fiscal de los Derechos Fundamentales, se hizo presente y medió con el sujeto para que se entregara de manera voluntaria.

“José” entró en razón, entregó el arma homicida y se rindió.

Detectives del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, tomaron control de la escena del crimen, también del agresor.

Habitantes del sector repudiaron el suceso, pidieron todo el peso de la ley para el victimario.

Algunos residentes indicaron  que “José” era una persona pacífica, llevaba años alquilando en este lugar y que ellos, no llegaron a notar ningún tipo de violencia en el homicida.

Momentos de los acontecimientos en la vecindad se hallaban tres mujeres, la tercera, una trinitaria que este hombre no llegó a agredirla.

 

 

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