Si, las personalidades sexuales existen y los expertos dicen que aprender qué son y lo que implican podría ser la clave para elevarte al terreno de los dioses del sexo.
Todo el mundo tiene una personalidad con características diferentes y esto también aplica cuando se trata del sexo, hay quienes lo tienen para gastar energía y acabar con el estrés, otros buscan una conexión personal con la pareja, otros son más extremos o aventureros, o hay quienes prefieren quedarse en el terreno del sexo vainilla, y entender eso puede ayudarte a darle a tu pareja lo que necesita, que al final va a garantizar que los dos lo van a disfrutar y no van a terminar con problemas que puedan llevar su vida sexual a la basura.
¿Qué es el buen sexo?
La verdad es que es difícil definirlo, lo que funciona para una pareja puede no hacerlo para otra, y lo que le gusta a uno puede ser un turn off para otros, y darse cuenta de eso llevó a la terapeuta sexual Vanessa Marin a tratar de identificar cuáles son los diferentes tipos de personalidades sexuales que existen.
Marin pasó 15 años estudiando a los pacientes que llegaban en busca de su ayuda y con eso descubrió que «así como es importante para nosotros entender lo que buscamos en una pareja y en una relación, necesitamos saber qué buscamos en nuestra vida sexual», como explicó a HuffPost.
No es un método exactamente científico, pero la experta logró, con la ayuda y el feedback de sus pacientes, definir algunos tipos de personalidades sexuales que aplican para la mayoría de las personas (aunque pueden existir muchas más) y que pueden ayudarlas a entender qué es lo que les gusta, cuál es su estilo y cómo complacer a su pareja.
¿Cuáles son las personalidades sexuales?
La importancia de conocer las personalidades sexuales está en que puede marcar la pauta para abrir la conversación con la pareja, para entender qué es lo que funciona, el ritmo con el que pueden avanzar las cosas o incluso qué tan compatible eres con otra persona, aunque no es grave que sus personalidades sean diferentes y siempre hay forma de llegar al punto medio.
El decompresor
Se trata de alguien que busca tener sexo para eliminar el estrés del día, sabiendo que un orgasmo es una forma de liberar energía y que incluso los puede ayudar a dormir mejor por la noche. Esta personalidad sexual tiende a enfocarse en el clímax, por lo que puede ser difícil que esté presente y disfrute el momento.
«El sexo es una forma de desahogarse y relajarse», escribió Marin en su publicación de blog. «Puedes buscar sexo porque te sientes tenso, o simplemente puedes disfrutar pasar tiempo disfrutando del resplandor crepuscular cuando el sexo ha terminado».
El explorador
Se trata de alguien que siempre está buscando cosas nuevas en el sexo, se trata de mantenerlo divertido y despertar la curiosidad, y de estar dispuesto a aprender cosas nuevas. «Estás abierto a probar algo incluso si no estás seguro de que te gustará», dijo Marin. «Puedes reírte de eso si tus exploraciones no funcionan al final».
El negociador
Se trata de un dar y recibir, se trata de alguien que está dispuesto a cubrir las necesidades de su pareja, pero espera que hagan lo mismo por él. «Quieres saber que a tu pareja le gusta dar tanto como a ti te gusta recibir, y viceversa», explicó Marin en su publicación de blog. Esto significa que, si notan que su pareja no está disfrutando la experiencia, pueden empezar a darle demasiadas vueltas y obsesionarse con la razón.
The Giver
Se trata de alguien que ve el sexo como el mejor regalo que le pueden dar a su pareja. «La experiencia sexual de su pareja es al menos tan importante como la suya propia, y probablemente incluso más», escribió Marin. «Estás muy en sintonía con la experiencia de tu pareja y te hace sentir bien saber que puedes hacer que tu pareja se sienta bien», aunque se sienten incómodos al ser el foco de atención.
El guardián
Esta personalidad se refiere a alguien que busca sentirse seguro con su pareja sexual, lo que puede haber surgido de algún trauma o mala experiencia. «Te gusta sentir esa base de seguridad con tu pareja y contigo mismo», explica el blog. «Tus límites son importantes para ti, al igual que el consentimiento entusiasta».
El que busca pasión
Esto se refiere a alguien para quien el sexo no es bueno a menos que sea apasionado, intenso o incluso un poco salvaje. «Estás muy en sintonía con la energía entre tú y tu pareja durante el sexo», escribió Marin. “Te encanta la idea de dejarte ir y perderte en el momento. Para ti, el mejor sexo es cuando el tiempo parece haberse detenido «.
El que busca placer
El placer físico lo es todo para esta personalidad, le gusta sentirse bien y es lo que busca siempre. «Incluso puede estar confundido acerca de todos estos diferentes tipos de personalidad, porque cree que el sexo es solo uno de esos placeres simples de la vida», escribió el terapeuta. «También disfrutas del tacto y el contacto físico durante todo el día».
El de las prioridades
Para esta personalidad, el sexo es una prioridad y no deja que el cansancio o los pendientes le impidan hacerlo regularmente. «Valoras tu vida sexual y estás dispuesto a dedicar tiempo a ella y a hacer sacrificios por ella», según la publicación del blog. “Te gusta que el sexo sea consistente. Incluso puede que le guste tener una rutina específica con la frecuencia con la que tiene relaciones sexuales «.
El romántico
Su propósito no es solo lo físico, sino tener una conexión emocional con su pareja, por lo que pueden disfrutarlo más cuando es íntimo, hay contacto visual y palabras bonitas. “El romántico y el perseguidor de la pasión son bastante similares, pero el romántico necesita tener intimidad emocional con una pareja”, dijo Marin. «Las aventuras de una noche no son lo tuyo».
El espiritual
Se trata de alguien que pudo haber crecido en una familia religiosa, por lo que le cuesta trabajo abrirse, experimentar o dejar de sentirse juzgado. «Crees que el sexo debería ser una experiencia trascendente», escribió Marin en su sitio. “El sexo es más grande que lo que sucede en el cuerpo. Puede que seas religioso o que disfrutes de filosofías orientales como el Tantra».
El que busca emociones
Nada de sexo vainilla, a esta personalidad la interesa explorar fantasías, probar cosas “arriesgadas” o jugar con BDSM y otros tabúes. “Puedes disfrutar de un elemento de juego de poder en tu vida sexual, como permitir que tu pareja te domine o que domine a tu pareja”, escribió Marin. «Mientras que al Explorer simplemente le gusta explorar por el mero hecho de explorar, tú anhelas ese sentido del tabú».
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