Ciudad Guayana. Este día martes, 15 de noviembre del año 2022, nuevamente viene a mi mente la historia que tengo grabada hace muchísimos años, (por lo menos 75 ruedas) siempre desde la corta edad de 5 años aproximadamente recuerdo en lo que se llamaba la “Casa del Obrero” en la calle derecha (calle Ciencias) en el centro de la ciudad de Maracaibo, en El Saladillo, se realizaban “tardes danzantes”.
Mi querida y recordada madre asistía en compañía de su hermano, nuestro tío Carlos, para bailar y divertirse y nos llevaba a los tres menores y ahí escuchábamos a la Orquesta del puertorriqueño Rafael Muñoz con la delicada voz de José Luis Moneró y otros intérpretes.
La otra era la Casino de la Playa con el cantante Miguelito Valdez, también llegamos a escuchar a la orquesta de Noro Morales, (puertorriqueña, que había contratado el Gral. Juan Vicente Gómez como Orquesta presidencial en Maracay) y la venezolana de Luis Alfonzo Larrain, que fue la orquesta Elite de aquel entonces y buen amigo del biografiado, pero esto no era en vivo, eran discos de pasta de 78 r.p.m que sonaban en un picot (pickup) y cada vez que sonaban 10 discos había que cambiar la aguja.
Pero entre estas variadas orquestas estaba la novel orquesta del momento, la Billo,s Caracas Boys y sus cantantes: el guarachero Víctor Pérez y el bolerista Rafa Galindo.
UNA HISTORIA SIN PAR
Cuando me refiero a la fecha 15 de noviembre, es porque en esta fecha, pero en el año 1915, en la República Dominicana, o sea hace 107 años estaba naciendo Luis María Frómeta Pereira, quien vivió con sus padres en San Francisco de Macorís, donde inició sus estudios de música en la Escuela Primaria, luego teoría y solfeo con el profesor Sixto Brea, armonía y composición con el ´profesor Rafael Pimentel, además saxofón y clarinete con Oguis Negrete.
Fue músico, compositor y director, su padre quería que estudiara medicina, lo cual realizó durante algunos años sin lograr terminar, porque para él era más grato e importante la música.
Después de una larga historia la cual se recoge en 7 libros, escrito por varias personas (los cuales tengo todos) ya que me considero “Billólogo”, y con mucha razón, cada uno de estos libros, con diferentes comentarios y en la actualidad acaban de editar un nuevo libro, con anécdotas no reveladas anteriormente.
Bien se dice que ya a los 15 años de edad fue fundador y director con el grado de Capitán de la Banda de Bomberos de la República Dominicana.
Para esa época quien presidia el gobierno en la Isla era el recordado Rafael Leónidas Trujillo “Chapita” quien también era músico y tenía una orquesta. La vida en ese entonces no era muy cómoda políticamente que se diga en la referida isla, mientras tanto nuestro biografiado se reunía con otros jóvenes, músicos también como José Ernesto “negrito” Chapuseaux, (cantante) Francisco Simón Damirón (pianista) y el trompetista (venezolano) Freddy Coronado.
Se comenta que fue Noro Morales, otros dicen que fue la cantante Ruth Fernández y otros dicen que fue Freddy Coronado, los influyentes que recomendaron al maestro Luis María, probar suerte en la ciudad de Caracas.
Sin pensarlo mucho, reunieron el grupo necesario para armar la orquesta, debían pedir permiso al Presidente de la Isla, quien les concede, pero… con la condición de que la orquesta se llamara Trujillo Jazz Band.
Se organizan, embarcándose en calidad de polizontes en un barco carbonero llamado el Sordwagen, ubicándose como polizontes en las bodegas y alimentándose con algunos panes y naranjas que habían obtenido, antes de partir en pleno muelle había un señor, un sastre, a quien Luis María le daba clases de saxo a cambio que le prestara el saxo en algunos momentos en la Isla para “matar un tigrito” en este caso, el sastre lo que reclamaba era que le devolviera su instrumento, que no se lo llevara, a lo que Luis María hizo caso omiso, el mismo saxo con que Billo se inició en Caracas.
DESVIO A CURAZAO
Resulta que en el viaje se encuentran con un temporal y el capitán del barco tiene que desviarse a Curazao, desembarcan, con la suerte que el cónsul en esta isla le logró conseguir un toque y se ganaron 50 dólares, lo que ayudó en la compra de otros alimentos que bastante falta le estaban haciendo, se dice que el barco atracó en el muelle de La Guaira, el día 31 de diciembre de 1937 (otros han dicho que antes tocó el Muelle de Maracaibo) lo cierto es que cuando llegan a la capital, ya tienen un contrato con los hermanos Sabal, en el edificio La Torre, diagonal a la Plaza Bolívar, donde estaba ubicado el Roff Garden, un lugar donde se bailaba y se disfrutaba, ya los Sabal los esperaban, pero estos hermanos habían anunciado a la orquesta como la Billo´s Happys Boys, lo que tuvieron que aceptar, con el temor de las consecuencias y represalias políticas y en Santo Domingo, estaban atentos a lo que sucedía a través de la onda corta, ya a las siete de la noche cuando se están sentando a cenar, los apuran, deben dejar el banquete que se les había servido, el público reclama ansioso por escucharlos y el que comienza con un tema, auténtico de la isla un merengue llamado “Caña Brava” es Ñiñi Vásquez, luego continua “el negrito” Chapuseaux, con el bolero “A que sabrá tu boca” este es el comienzo de esta larga y exitosa historia.
A los tres años de estar en la capital, a Billos le ataca una enorme fiebre tifoidea, lo hace tomar reposo, se sentía muy mal de salud, el mundo está en plena guerra mundial, la mayoría de los músicos regresaron a Santo Domingo, Chapuseaux y Damiron se fueron a los EE. UU; mientras Billo, se enamora de la Sultana del Ávila, le encanta la manera de vivir en Caracas, decidió quedarse y luego después de la recuperación, en el año 1940 inició una nueva orquesta que pasa a llamarse la Billo,s Caracas Boys.
Sus primeros cantantes fuero Kuroki Sánchez, Víctor Pérez, Rafa Galindo, con el pasar del tiempo en el año 1945 entra “El Ciclón Antillano” Manolo Monterrey y Miguel Briceño y así sucesivamente va variando los integrantes y cantantes por una u otra razón, esto le trajo fuertes consecuencias por los directores de otras orquestas rivales quienes presidian la AVADE.
Estuvo tiempo fuera de la escena (improvisó en Sabana Grande un restaurant llamado El Rincón de Billo) hizo una sociedad de palabra con Renato Capriles para fundar la Orquesta Los Melódicos, se fue a Cuba donde grabó con la ayuda de la orquesta de Bebo Valdés, con Alberto Beltrán, Pio Leiva, Víctor Piñero y Carlos Díaz.
Por otro lado se le presentó otro problema legal, la primera esposa, Mercedes Olimpia Senior, con quien se había casado en Santo Domingo, lo acusó de bígamo, cuando Billo contrajo matrimonio aquí en Venezuela con la zuliana Haydee Grillo Rodríguez, donde salió airoso, el divorció con la primera fue confirmado legal y se volvió a casar después de haber pagado tres meses de cárcel con Haydee con quien tuvo cinco hijos, cuatro hembras y un varón.
Con el tiempo se divorció de nuevo y se casó con Morelia Peraza, aquí tuvo a Luis y Amable y de los trece en total que tuvo, también nació (el mayor) Luis Vicente “Charlie” el único que se graduó de ingeniero agrónomo para complacer al “viejo” y también es el único músico reconocido a quien Billo le entregó públicamente la batuta en la celebración de los 50 años de vida artística que le brindaron en el hotel Caracas Hilton, donde hicieron presencia muchos de sus músicos, cantantes, amigos y admiradores de sus orquestas anteriores para brindar y felicitar al músico y cronista musical de Venezuela y reconocer a su hijo mayor como director de la actual orquesta.
Anteriormente después de regresar de la Isla de Cuba en el año 1960, es cuando arranca lo que él llamó la tercera república, con un éxito avasallador, con una nueva orquesta sumamente renovada y estrenando dos excelentes cantantes marabinos: Felipe Pírela y Cheo García después trajo a otro zuliano: Joe Urdaneta, y con el tiempo José Luis Rodríguez (aun no era El Puma, solo un pequeño felino) cubre la ausencia de Felipe que se había ido a probar suerte como solista.
Billo trajo una infinidad de buenos boleristas y guaracheros, son demasiados para enumerarlos pero se siguen escuchando,
NO HAY CARNAVAL, NAVIDAD, GRADUACIONES SIN BILLO´S-
Entre tantos homenajes y reconocimientos recibidos, jamás mostró emociones negativas, todo lo contrario, siempre con una sonrisa muy simpática, pero el 28 de mayo, en un ensayo programado para dirigir la Orquesta Filarmónica de Caracas, en el Complejo Cultural Teresa Carreño, la emoción lo impactó en exceso en el ánimo de Frometa, quien se desplomó al instante, probablemente víctima de una hemorragia cerebral, sin recuperar la conciencia, finalmente se despidió este excelente músico que amó a este país que lo acogió y quiso como su segunda patria y nunca se nacionalizo, pero no hay que dejar de reconocer que la amó más que muchos nacidos aquí , sobre todo a su querido amor la ciudad capital, su enamorada Caracas, a la cual compuso tantas melodías… hasta luego maestro Billo, nos dejaste pendiente con el tema que estrenarías ese día: “UN CUBANO EN CARACAS” estarás acompañado del ultimo cochero de la ciudad, ISIDORO Cabrera, del MIELERO DE SAN JOSE, de EL CHICHERO, de EL AMOLADOR, paseando en EL METRO por EL GUAIRE, viajando a la Isla de MARGARITA, por los LLANOS , SAN CRISTOBAL, MARACAIBO Y MUCHOS MAS, MATURIN Y BARCELONA y visitando EL NUEVO CIRCO y tocando de los años cuarenta MI SAXOFON.
Dios te guarde y de vida eterna.
Por Evelio Lucero
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