Ciudad Guayana– Los meses de septiembre y octubre solían ser el maratón para comprar los pantalones, camisas, zapatos, monos y todo el conjunto de vestimenta para el colegio o liceo. Ahora con un salario mínimo equivalente a 2 dólares y unos precios dolarizados, la tarea de cada año se ha vuelto más difícil, para vendedores y compradores.
El conjunto entero de camisa, pantalón y zapatos puede llegar a costar 40 y 50 dólares, llegando a ser los zapatos el complemento de mayor precio, oscilando entre los 10 y 30 dólares.
Los precios varían según la marca y las ofertas que se pueden encontrar en los diferentes negocios. Algunos han optado por los descuentos como estrategia para atraer clientes, debido al poco movimiento de ventas.
“Del 100% ni siquiera el 5% se esta vendiendo ahorita. En el último mes hemos vendido 3 pares de zapato escolares” declaró Yosibel Rivas, gerente de una zapatería.
“Un par de zapatos, de buena marca, te sale en 30 o 32 dólares afuera, tenemos 20% de descuento en pares de 20 y 15 dólares, pero aun así no hay movimiento” dijo Rivas, en referencia a las pocas ventas de zapatos escolares.
Mientras, las camisas y chemises se pueden encontrar con precios que van desde 5 a 10 dólares, dependiendo de las ofertas. Los pantalones y monos superan los 10$, siendo junto a los zapatos el otro complemento de costo más elevado.
“Las personas preguntan, van y vuelven a ver si compran o no. Han salido 2 o 3 camisas, 1 pantalón, 1 mono, pero nada como épocas escolares”, respondió Diana Salazar, gerente de una tienda de ropa y uniformes.
El común denominador son más las personas que preguntan que las que compran. Aun cuando varias tiendas tienen descuentos por la temporada de regreso a clase, son pocas las que han visto esas estrategias como exitosas.
¿Cómo lo viven los representantes?
Lourdes Moreno, profesora y abuela de tres niños que van 2do, 3er y 4tgo grado, nos contó cómo tiene que “guerrear” para conseguir los uniformes exigidos por el colegio de sus nietos.
“Me genera estrés y angustia no poder tenerles sus uniformes (a los niños) para que puedan ir a clase” dijo Moreno, quien tiene que balancear con la ayuda de su hijo, y su salario mínimo los gastos necesarios.
“Hay que tenerle a cada uno más de dos camisas porque son niños y se ensucian. Además de eso, hay que comprarles los uniformes deportivos que pide el colegio” señaló Lourdes.
A su vez indicó las dificultades que se presentan a la hora de buscar las camisas, pantalones y zapatos, pues “no se puede cuando un buen par de zapatos no baja de 25-30 dólares”.
Como Lourdes Moreno están muchos padres y representantes, teniendo que hacer lo imposible para conseguir que sus hijos (o nietos) puedan tener un regreso a clase normal.
Víctor Solórzano
Pasante
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