Sao Paulo.-La producción industrial brasileña empieza a sentir los efectos del coronavirus al bajar un 0,6% en los dos primeros meses de 2020 y acumula un descenso interanual del 1,2 %, informó este miércoles el estatal Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).
Las fábricas de la mayor economía suramericana redujeron su producción un 0,4 % en febrero frente al mismo periodo de 2019, lo que supone el cuarto mes seguido con un resultado negativo.
No obstante, la producción industrial subió en el segundo mes del año un leve 0,5 % con respecto a enero pasado.
El resultado aún no refleja la caída que se prevé en el sector como consecuencia de la crisis del coronavirus, que en Brasil deja cerca de 6.000 contagios y unas 200 muertes, lo que ha obligado a muchos estados del país a adoptar medidas de aislamiento como el cierre de todos los comercios, menos lo de primera necesidad.
No obstante, algunas actividades industriales ya están sintiendo los primeros efectos de la pandemia global.
Ese el caso de los equipamientos de informática y electrónicos, cuya producción cayó en febrero un 5,8 %, impactado por la situación de China, origen del coronavirus y de donde muchas empresas del ramo importan insumos para la manufactura de sus productos.
Por otro lado, la industria automovilística paralizó en marzo todas las fábricas del país.
La patronal justificó su decisión ante la «necesidad» del distanciamiento social para evitar la propagación del patógeno y la caída en la demanda por la producción de nuevos vehículos, pues muchos concesionarios están cerrados.
La producción de vehículos, que se concentra principalmente en Sao Paulo, donde se encuentran la mayoría de las líneas de montaje y actualmente es el principal foco de la pandemia en Brasil, emplea a cerca de 126.000 personas en el país.
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